TMB va a la huelga solo por 700 euros al año por trabajador

En un juego de declaraciones tan cruzadas, en un tablero con las fichas tan desordenadas, el ciudadano acaba cambiando de canal o pasando la página con hastío. Se queda con que la plantilla de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) irá a la huelga durante el congreso más importante del año y piensa que menudo engorro porque no tendrá ni metro ni bus durante cuatro días. Luego entra en las causas y todo se nubla. Quizás porque ya tiene suficientes problemas en su vida como para entender el enésimo convenio colectivo que acaba en sonada protesta laboral. Sepan, de manera muy resumida, que los 7.300 trabajadores exigen, entre otras muchas cosas, el IPC acumulado del 2011 que la empresa les prometió. Sale a unos 700 euros por cabeza, poco más de cinco millones de euros. ¿En caso de percibir ese dinero, retirarían la amenaza de reventar el valioso Mobile World Congress que tanto costó retener en la capital de Catalunya?

Habrá que partir de la base de que nadie actúa con malicia. Si la compañía no quiere explicar en qué se gasta el dinero, tal y como reclaman los comités de empresa, sus razones tendrá. Y si la plantilla propone un paro que colapsará la ciudad y dañará la línea de flotación del sector turístico, también sus motivos tendrá. Por el momento, lo que hay es mucho miedo, sensación de que la ola es imparable, con los políticos llevándose las manos a la cabeza mientras la mesa de negociación sigue vacía.

UN VIEJO DICHO SINDICAL / Pere Ramon (CGT), presidente del comité de empresa del metro, anunciaba ayer que el martes presentarán la convocatoria de paro entre el 27 de febrero y el 1 de marzo en el Departament de Treball. Comparte el dicho de que la mejor huelga es la que no llega a producirse, pero «las circunstancias son las que son ahora mismo» y por el momento, «con los puentes de diálogo rotos -expone-, no hay otro camino que la movilización». Asegura que han pedido ver a Xavier Trias en dos ocasiones y nunca les ha recibido. «¿Responsabilidad, dicen? Dónde queda su responsabilidad cuando hemos intentado negociar con él y no ha tenido la decencia de abrirnos la puerta?», sostiene. El alcalde no tiene cargo alguno en TMB.

Lo suyo es fe en una promesa asida al convenio colectivo que la crisis ha ido diluyendo. Se les debe el IPC acumulado del 2011 que la empresa firmó que abonaría ahora, en el 2012, y con la cifra del 2,4% de crecimiento confirmada. Es un trabajo ya hecho, sudado, argumentan. Un portavoz de TMB, sin embargo, explica que el transporte público de Barcelona «está al borde de la quiebra», que si no pagan ese dinero «no es porque no quieran, sino porque no existe» y que los 23 directivos se han bajado el sueldo un 25% desde el 2010 mientras que la plantilla lo ha visto incrementado un 12% en los últimos cuatro años cuando el IPC acumulado ha superado algo el 7%.

En cualquier caso, si el operador acaba pagando esos 700 euros a cada empleado, faltaría ver de qué manera se compensa el presupuesto, de qué partida se saca ese dinero. A preguntas de este diario, Ramon admite que si la empresa se aviniera a desembolsar esos poco más de cinco millones de euros, la huelga quedaría «seguramente desconvocada».

¿CUÁNTO COBRAN? / El sueldo de los trabajadores de TMB varía mucho en función de los pluses. Miguel Ángel Arias (UGT), presidente del comité de empresa de autobuses, explica que el salario medio de un conductor está sobre los 29.000 euros brutos al año, «cerca de 1.300 euros netos al mes», concreta. Señala, no obstante, que el 10% de la plantilla «es mileurista». La empresa da una horquilla de 28.000 a 40.000 euros brutos al año para el personal en convenio, mayoritariamente conductores y agentes del metro.

Arias pone como ejemplo de «exitosa negociación» el caso de Madrid, donde el diálogo se hizo «sin hacer ruido y sin la empresa intoxicando a los medios de comunicación». Ese quizás sea un final feliz, pero también los hay menos halagüeños: el metro de Bilbao está descontando la subida del sueldo del 2011 en las tres primera nóminas del año hasta recuperar 1.500 euros de cada trabajador. También a los ya muertos.

En el caso de TMB, el ahorro que se espera conseguir con los ajustes salariales -entre personal dentro y fuera de convenio- es de 16 millones de euros, parte importante de los 56 millones que la compañía debe arañar este año para garantizar la viabilidad. Esto se sumaría a los 79 millones que dejó de gastar entre el 2009 y el 2011. La razón del ajuste se explica por la caída de la financiación pública, ya que, mientras la Generalitat aporta el dinero de siempre y el ayuntamiento, un 10% más, el Estado aprieta y en el 2012 pondrá 70 millones menos.