PREVISIÓN DE LAS COMPRAS DE TURISTAS EN BARCELONA

...y tiendas bajo amenaza

El 40,8% de negocios de alquiler están afectados por los cambios de la LAU

Interior de la histórica La Colmena, ayer.

Interior de la histórica La Colmena, ayer.

P. C.
BARCELONA

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Sorpresa y susto mayúsculo para el pequeño comercio y hasta para el Ayuntamiento de Barcelona. El informe trimestral de Esade y la Fundació Barcelona Comerç presentado ayer arroja un saldo de tiendas afectadas por el final de los alquileres antiguos (diciembre del 2014) muy superior a cualquier previsión realizada hasta la fecha en la ciudad. Según la encuesta realizada en unos 500 comercios de los ejes de distrito, el 40,8% de arrendatarios estarían afectados por dicho cambio normativo. O lo que es lo mismo, deberán ajustar sus condiciones de arrendamiento antes de un año y medio o cambiar de local. O cerrar.

Las cifras aportadas por el estudio quedan muy por encima de los cálculos estimados hace apenas unos años, cuando se habló del 15% de los locales en régimen de alquiler. Una cantidad que se habría ido rebajando durante los últimos tiempos, en la medida en que se aproximaban los cambios de la LAU (ley de arrendamientos urbanos). Sin embargo, los autores del estudio de Esade concluyen que más del 40% de arrendatarios sufren dicha problemática, mientras que en el conjunto de tiendas locales la cifra sería del 35,3%.

Más alarmante aún resulta saber que el 47,5% de estos afectados intentará negociar las nuevas condiciones, mientras que un 43% todavía ni se lo ha planteado. En cambio, un 5,5% da por hecho que cambiará de ubicación para seguir con su actividad, mientras que un 3,8% estudia cerrar su empresa.

Por zonas, de ajustarse a la realidad, los números podrían suponer decenas de cierres en los casos en que no se produzcan acuerdos. Por ejemplo, en ejes como Sant Andreu y Sant Antoni habría más de un 64% de afectados. También superarían la mitad en el Raval y Nou Barris, y la rozarían en Horta. En Barna Centre (el eje entorno al Portal de l'Àngel) supondrían más de una quinta parte de los establecimientos.

El presidente de la fundación, Vicenç Gasca, mostró asombro ante los resultados y los atribuyó a posibles traspasos de negocios que hayan mantenido condiciones. Como ya avanzó este diario la semana pasada, Gasca afirmó que la renegociación será más fácil en los ejes de barrio, ya que al haber locales disponibles por la crisis, los afectados podrán encontrar reubicaciones asequibles o bien estar en condiciones de pactar la continuidad en condiciones no abusivas. El concejal Blasi dijo que el ayuntamiento trataría de mediar en las renovaciones y asesorar a afectados.

Tanto él como Josep Francesc Valls, director del estudio y catedrático de márketing, insisten en que alcanzar acuerdos será especialmente difícil en la zona premium (los ejes de oro), donde los precios están por las nubes y los propietarios buscan al mejor postor y en las tiendas emblemáticas e históricas del centro.