TRANSFORMACIÓN DE UNA ARTERÍA DE LA CIUDAD

El solar del Paral·lel vindicado para uso cultural será una residencia de estudiantes

Teatre Talia

Teatre Talia / periodico

HELENA LÓPEZ / BARCELONA

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Como espectadores de una partida de Monopoly en la que iban viendo cómo la casilla de Paral·lel 100 iba cambiando de manos (y de valor). Así explica Toni Oller, presidente de la Associació Pro Teatre Talia, cómo han vivido durante la última década la historia del solar donde antaño se levantó uno de los teatro más activos de la avenida. Entidad nacida para reivindicar la memoria del Paral·lel más farandulero, que tenía en estos terrenos, donde confluyen las calles de Aldana y de Borrell, una suerte de esperanza sobre otro Paral·lel posible (un solar vacío es siempre una oportunidad). Ilusión que entierra el último cambio de propiedad del terreno. El nuevo titular sí tiene un proyecto para el solar, y guarda nula relación con el pasado del lugar. La propietaria actual es la sociedad Premium Student Housing, cuyo nombre no deja demasiado margen a la imaginación.

Daniel Ferrer, consejero delegado de la empresa, explica que su intención es levantar en el lugar una residencia de estudiantes y que están negociando con el Ayuntamiento de Barcelona los usos exactos del futuro edificio y su volumetría, para elaborar el plan especial, requerimiento necesario para construir en una parcela calificada como equipamiento y paso previo a la petición de licencia. La intención de la propiedad es, según su consejero delegado, convertir el solar, de 750 metros cuadrados, en una residencia estudiantil con salas de estudio y de 'coworking', "en un edificio sostenible", en el que "se trabajará la alimentación ecológica". "Los estudiantes podrán contratar media pensión o pensión completa", detalla Ferrer.  

NO AFECTADOS POR LA MORATORIA

La restricción hotelera impulsada por el gobierno de Ada Colau no afecta a las residencias de estudiantes, siempre que, por un lado, sean únicamente eso, una residencia, y, por el otro, tengan un convenio con una institución docente. Ambos requisitos cumplidos por el proyecto de Premium Student Housing, según explica su consejero delegado, quien asegura que desconocía la historia del solar antes de adquirirlo. "Estamos dispuestos a reunirnos con el señor Oller y a mirar de recordar de alguna manera ese pasado en la residencia", concluye el empresario, quien se enteró del valor simbólico del enclave por una llamada del activista cultural de Sant Antoni. Este, a su vez, supo de los planes para el solar al ir a comprobar su propiedad para intentar negociar su alquiler. 

En una de las últimas reuniones del proceso participativo para decidir el futuro del vecino -y hoy por hoy en estado de ruina- Teatre Arnau, Oller puso sobre la mesa la posibilidad de instalar una carpa provisional en los terrenos del Talia, para que las compañías implicadas pudieran trabajar mientras se realizan las obras en el Arnau, que se prevén largas dada la riqueza del subsuelo. Al investigar sobre la propiedad y el estado de la parcela para presentar un proyecto en firme, Oller se encontró con que ya había un plan para el lugar.

EL FANTASMA DE LA GENTRIFICACIÓN

El vecindario organizado de Sant Antoni, reunido en la plataforma FEM Sant Antoni, está en alerta por la gentrificación que sufre el barrio, y que temen que se agudice con la reapertura del reformado mercado, que lo convertirá en reclamo turístico de primer orden. Noticias como la intención de abrir una residencia de estudiantes son tomadas con todas las precauciones, ya que las residencias son percibidas por gran parte de la ciudadanía como albergues camuflados. Basan su temor en experiencias muy cercanas, como las residencias Melon District -una de ellas a solo algunos metros del solar del Talia-, denunciadas por el propio ayuntamiento por dicha práctica. Fuentes municipales subrayan que el gobierno municipal es "inflexible" a la hora de velar por el cumplimiento de la legalidad "ya que comporta problemas de convivencia con los vecinos". "En cuanto detectamos que una residencia actúa como albergue, actuamos de manera decidida y contundente", aseguran las mismas fuentes.  

La normativa permite a residencias vinculadas a centros de enseñanza tener una pequeña cuota de habitaciones alquilables por día en algunos periodos. Pero el control del volumen es complejo y en la práctica los turistas suelen pernoctar en muchas de estas.

Les Corts ha vivido también este verano una batalla similar contra la residencia de investigadores proyectada en al calle de Remei con Galileu, que los vecinos, en pie de guerra, están convencidos de que se utilizará también como hotel.

{"zeta-legacy-despiece-horizontal":{"title":"Esperando la plaza de Pepe","text":"Adem\u00e1s de la recuperaci\u00f3n\u00a0(o reconstrucci\u00f3n) del\u00a0Arnau,\u00a0la otra asignatura pendiente en el\u00a0Paral\u00b7lel,\u00a0cuya reforma, impulsada por el gobierno de\u00a0Trias,\u00a0fue pol\u00e9mica (el propio exalcalde sufri\u00f3 un escrache el d\u00eda de la inauguraci\u00f3n), es la plaza de Pepe Rubianes. Se aprob\u00f3 que una de las (tambi\u00e9n pol\u00e9micas) nuevas placitas nacidas de la reforma de la avenida llevar\u00eda el nombre del c\u00f3mico, pero, por el momento, no se ha producido el bautizo. Sus 'viudas' siguen esperando."}}