Puesta a punto junto al río

Para Jay y Regina, el parque fluvial del Besòs es el principio y el final de muchas cosas. El principio porque allí fue donde se conocieron y estrecharon amistad hasta tal punto que hoy comparten paternidad. El final porque sobre el césped que se extiende junto al cauce del río culminan sus carreras «de al menos 8 kilómetros» que no se saltan «ni un solo día», asegura Jay, de 26 años y nacionalidad ghanesa. Esa voluntad férrea ha coincidido también con el final del sobrepeso de la nigeriana Regina, que a sus 22 años llegó a pesar más de 100 kilos. «Con dieta y carrera diaria he bajado 40 kilos en menos de un año», explica, orgullosa.

También para ponerse en forma acude a este emplazamiento natural Venancio Arjones, vecino de Badalona. La fatalidad ha querido que hoy pinchara una rueda de su flamante bicicleta de montaña. La buena suerte le concedió que el siniestro se produjera al final del recorrido. Se ha propuesto recorrer parte de Suiza en bici la próxima primavera y ya está afinando su puesta a punto. A veces aprovecha las «buenas sensaciones» ante el manillar y no se detiene al final del carril bici, a la altura de la fábrica de cemento de Montcada i Reixac, y sigue hasta La Garriga, «con la excusa de saludar» a su hermana.

No necesita excusas para dejarse caer por el parque Isabel Carmona, vecina del Singuerlín, que se desliza sobre sus patines siempre que tiene ocasión. «Aquí puedes desconectar de todo», explica. Hoy echa de menos la música que le suele acompañar en sus 10 kilómetros de recorrido hasta las torres de Sant Andreu, pero no pierde un ápice de concentración. También así puede disponer de un espacio con alternativas «para todos los gustos», dice antes de perderse en el horizonte.