dispositivo de seguridad para el espacio público

La ordenanza contra el nudismo se cobra las dos primeras multas

La Urbana destina 210 agentes más a vigilar BCN durante el verano

EL PERIÓDICO
BARCELONA

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La nueva ordenanza municipal que persigue el nudismo y el seminudismo -concepto cuyos límites parecen vascular dentro de la subjetividad de la policía- ya ha generado las dos primeras multas desde que la norma entrara en vigor a finales del mes pasado con los votos favorables de PSC y CiU. Las sanciones, que oscilan entre los 120 y los 500 euros, se han impuesto en dos distritos cercanos a las playas, Ciutat Vella y Sant Martí, donde la Guardia Urbana ha advertido a otra treintena de personas que esquivaron el castigo por los pelos. La aplicación de esta nueva norma es una de las principales novedades del dispositivo que el ayuntamiento pondrá en marcha el próximo 15 de junio para que Barcelona viva un verano lo más plácido posible.

Más allá del cerco a los que paseen con los atributos al viento, la ciudad dispondrá de 210 agentes más para controlar los puntos más calientes, como son las plazas de Gràcia, la Rambla, el parque Güell, las fuentes de Montjuïc o las playas. También habrá servicios especiales para cubrir eventos como la verbena de Sant Joan, las fiestas de Gràcia y de la Mercè, el festival Grec o el Sonar. Estos nuevos policías, procedentes del Instituto de Seguridad Pública de Catalunya, realizarán funciones de proximidad -la anhelada policía de barrio- y empezarán a patrullar la noche del 23 de junio. La consigna será actuar «contra aquellas conductas que comporten una alteración de la convivencia o la degradación del espacio público».

En cuanto a la movilidad, el ayuntamiento reforzará las líneas de bus que conecten con el litoral y aumentará las tareas de mantenimiento del Bicing para garantizar el servicio cuando el buen tiempo dispare los usos diarios de la bici pública. Los Bomberos de Barcelona pondrán especial atención a los distritos fronterizos con Collserola para evitar que cualquier descuido acabe en tragedia, mientras que las playas contarán con todo el personal de emergencia y salvamento necesario. El dispositivo finaliza el 30 de septiembre, tras las fiestas de la ciudad.