La nueva vía provisional al puerto ampliado rodeará la Zona Franca

Grandes empresas de la Zona Franca como Nissan, Makro o Mercabarna que utilizan el eje estratégico del polígono industrial que es la calle 4 respiran tranquilas. Tras la tempestad por sus quejas y el insólito enfrentamiento institucional por el trazado del apaño ferroviario provisional que permitirá, a falta de los accesos definitivos, conectar la nueva terminal de contenedores del muelle Prat, ha llegado la calma. Los trenes que llevarán la carga de la multinacional Hutchinson, adjudicataria del muelle que funcionará en el 2012, no colapsarán la calle 4 como temían los directivos de las firmas y también los del polígono. La nueva vía solo usará el tercio final y menos comprometido de la arteria y se desviará al este en paralelo a la calle A hasta llegar al ramal de Can Tunis.

UNANIMIDAD / Todas las partes aceptaron ayer esta solución en la Delegación del Gobierno tras el acuerdo alcanzado el día antes en Madrid por el teniente de alcalde de Barcelona Antoni Vives, cuyo ayuntamiento preside el Consorcio de la Zona Franca, y el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán.

El plan inicial del puerto para que el tercer raíl de ancho internacional se añadiera a las vías ya existentes a todo lo largo de la calle 4, lo que motivó la carta de queja de las empresas y del consorcio, fue retirado. La nueva ruta aceptada por unanimidad por las tres instituciones afectadas (Estado, Generalitat y ayuntamiento) se podrá construir en los escasos 12 meses que faltan para que Hutchinson empiece a operar, será logísticamente eficaz y tendrá una afectación menor en el polígono, afirman los actores del pacto.

Las partes acordaron, igualmente, crear un grupo técnico liderado por el puerto que redactará el estudio de la movilidad generada por las nuevas conexiones ferroviarias.