Montserrat Iniesta, nueva directora del Born, Centre de Cultura i Memòria

Montserrat Iniesta González, especialista en el estudio antropológico del patrimonio, ha sido nombrada directora del Born, Centre de Cultura i Memòria, controvertido equipamiento que llevaba desde septiembre del 2015 sin nadie que asumiera el cargo desde la marcha del editor Quim Torra, que optó por la presidencia de Òmnium Cultural tras la muerte de Muriel Casals.

"Lo que más me interesa es investigar temas relacionados con la memoria pública. Mi último trabajo para la Unión Europea lo he dedicado a las narrativas culturales durante la crisis. Dirigir el Born es un reto conceptual y cultural, un trabajo excepcional a nivel internacional y un formato museístico por desarrollar con un potencial enorme", ha declarado este viernes Iniesta, que se muestra muy contenta de "volver a Barcelona" tras un largo periplo por Vilafranca de Penedès, donde desarrolló el proyecto del Vinseum, el Museu de les Cultures del Vi de Catalunya, que terminó dirigiendo en sus primeros años de vida; por Colombia, donde ha asesorado al Museo Nacional de la Memoria de Bogotá, y por Lleida, concretamente en La Granadella, población que albergará el proyecto que ella ha realizado sobre La Cooperativa, el Museu de l'Oli de Catalunya.

La antropóloga ha ganado un concurso público encargado por el Institut de Cultura de Barcelona que ha contado con una comisión asesora en la que han participado Borja de Riquer, catedrático de Història de la Universitat Autònoma de Barcelona; Margarida Sala, directora del Museu d'Història de Catalunya; Joaquim Albareda, catedrático de Història Moderna de la Universitat Pompeu Fabra; Francisco Ferrándiz, director de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y Stéphane Michonneau, catedrático de la Universidad de Lille.

EQUILIBRIO Y REALISMO

En su veredicto, la comisión ha valorado que su candidatura muestra un "equilibrio firme" entre los elementos patrimoniales del Born y todo el desarrollo de los programas de Memoria. Asímismo, ha considerado que el proyecto de gestión que ella ha presentado a concurso plantea un marco conceptual "profundo y claro", tanto patrimonial como de memoria, y aporta una dimensión realista al proyecto.

El Ayuntamiento de Barcelona rebautizó en febrero del 2016 al Born Centre Cultural como Born Centre de Cultura i Memòria y, dentro de su política de otorgar más valor a la lucha democrática, puso fin a la dedicación exclusiva del espacio a la reivindicación nacionalista desde su inauguración en septiembre del 2013. Así, el edificio del antiguo mercado no es únicamente un santuario dedicado a exaltar la Barcelona arrasada tras el asedio y la derrota de 1714, ya que acoge exposiciones y congresos sobre temas tan diversos como la tortura, los movimientos vecinales y el universo de los mercados. Y hasta exhibiciones muy polémicas, como fue el caso de 'Franco, Victòria, República. Impunitat i espai urbà', que terminó con peleas, lanzamientos de huevos, manifestaciones, altercados y hasta la decapitación de la estatua equestre del dictador.