Los vecinos critican la lentitud de las zonas verdes de las nuevas Glòries

El hormigón toma ventaja ante el exuberante, barroco y aún inédito plan de Canòpia Urbana

La Gran Ví apor debajo de las Glòrias

La Gran Ví apor debajo de las Glòrias / periodico

RAMON COMORERA / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La transformación urbanística de las Glòries debería ser paralela a la construcción de los 14 equipamientos previstos en el compromiso de hace ocho años y en especial de aquellos que tienen vinculación directa con la vida de los vecinos de los cuatro barrios que rodean ese enorme espacio de 13 hectáreas: Clot-Camp de l’Arpa, Poblenou, Fort Pienc y Sagrada Família. Pero aunque se ha avanzado en desarrollar ese plan, siempre ha habido desfase y ahora además repunta, mientras el hormigón del túnel toma ventaja.

    "Parece que todo va lento", afirma en este año electoral Miquel Catasús, de la Associació de Veïns del Clot-Camp de l’Arpa, uno de los cuatro activos líderes de las entidades que pilotan desde hace años la reivindicación ciudadana. Este todo se refiere en especial a las fases del exuberante y barroco parque Canòpia Urbana que debe llenar el lugar de verde. Pero también atañe a los nuevos y necesarios pasos para realizar los proyectos y las previsiones de inversión de los equipamientos aún pendientes.

    La gran zona verde tiene acabado su anteproyecto a aplicar inicialmente en seis fases del 2015 al 2018 con un coste de 30 millones. Se iba a presentar la pasada primavera, en la recta final del mandato del exalcalde Xavier Trias. Pero la tragedia del piloto suicida sobre los Alpes aplazó el acto y la campaña electoral lo aparcó sine die.

    Empezar a plantar este mismo año, que está en la recta final, no será posible, más allá del prado, ahora mismo en bastante mal estado, creado ya al norte del espacio donde estaban los antiguos Encants, y que forma parte de la urbanización provisional de la plaza. "El proyecto ejecutivo debería hacerse en un año para poder empezar alguna de las fases del parque", reclama Catasús. El representante vecinal explica que están de acuerdo "en un 90%" del anteproyecto, del que debería cambiarse, no obstante, "algún uso turístico que el equipo de Ada Colau tampoco debe aceptar". 

    La teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz, afirma que para el nuevo gobierno "el proyecto está bien y no hay que cambiarlo, incluido el gran mirador" previsto en la zona central. No avanza, sin embargo, plazos ya que "a principios de diciembre" asegura que hablará de Canòpia Urbana con los vecinos.

    Estos tienen otra reivindicación estratégica sobre la mesa. Piden reunir la comisión de seguimiento "para tratar del parque y los equipamientos pendientes antes de que en diciembre se cierren los presupuestos del 2016", declara Catasús.

Escuela acabada

Los barrios que velan por el cumplimiento del Compromís piden que se den pasos para redactar los anteproyectos de la guardería y el polideprtivo incluidos en el pacto. La primera se situaría en la zona de la Sagrada Família y el segundo, en el sector del Poblenou. Sanz confirma que ha hablado de estos equipamientos y que se incluirán en las futuras prioridades.

    El último avance en este ámbito se produjo en septiembre cuando se estrenó en la calle del Consell de Cent, al norte de la plaza, la flamante escuela de los Encants, financiada por el Área Metropolitana de Barcelona. El innovador centro pedagógico ha dejado atrás al fin los barracones de la calle de los Castillejos. Ahora, en el cruce de Bolívia y Badajoz, al sur, avanza a buen ritmo el complejo de 105 pisos con servicios para ancianos, el 'casal' de jubilados y los locales para un futuro CAP y un centro de salud mental. Las obras deben acabar en el 2016.