MEJORA DE LOS DERECHOS

Un juez ordena permitir móviles y relojes en el CIE de Barcelona

Exige cumplir la capacidad de las celdas y evitar aglomeraciones

Imagen del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca de Barcelona.

Imagen del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca de Barcelona. / nas/sc

J. G. ALBALAT / BARCELONA

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El magistrado del Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona ha reclamado este martes que se mejoren las condiciones del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Barcelona, tras haberlo visitado en varias ocasiones, y que los internos puedan tener teléfono móvil y reloj. Ha recordado que el único objetivo del CIE debe ser que las personas se encuentren "a disposición permanente de la autoridad administrativa" para ser expulsados, por lo que solo se les puede privar de libertad y no de otros derechos.

En ese sentido, ha considerado que la normativa que regula los CIE "no menciona" que deban restringirse las llamadas telefónicas, por lo que pide que se permita el uso de teléfonos móviles para llamadas y mensajes, y así facilitar el contacto con parientes y amigos "y aliviar su soledad y angustia, la cual es patente".

"No producen ningún perjuicio o perturbación en el orden interno, sino que más bien contribuyen a facilitar la paz del centro", ha señalado el juez, que ha pedido también que se instalen más teléfonos públicos.

USO DE RELOJES

Ha criticado duramente que se retiren efectos personales como los relojes de pulsera, y ha dicho que no solo deben poder tenerlos sino que el centro debe colocar relojes de pared, ya que los internos se quejan de "perder la noción del tiempo".

Además, ha pedido que se respete la capacidad de las celdas --preparadas para seis internos--, ya que la aglomeración genera "agresividad y conflictos", y ha reclamado que se amplíe el tiempo de duchas, que según los internos se reduce a dos o tres minutos.

También solicita que se instalen sanitarios dentro de las celdas y que se realicen pruebas y tratamientos médicos a los internos aunque carezcan de tarjeta sanitaria.