MOTOCICLISMO: LOS RECUERDOS DE UN VIEJO SUEÑO

24 Horas apasionantes

Fueron tiempos que no volverán. Fueron tiempos de pasión, de vivir junto a los árboles y en las aceras las carreras de motos en la montaña mágica de Montjuïc.

Motocicletas de la exposición.

Motocicletas de la exposición.

EMILIO PÉREZ DE ROZAS
BARCELONA

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El Museu de la Moto, muy próximo a la Catedral de Barcelona, cerquita del corazón de la ciudad, en calles estrechas y poco transitadas, que pasa por ser eso,la catedralde los recuerdos del mundo de las dos ruedas, ha preparado para este fin de semana un intenso programa de entretenimientos para recordar viejos sueños.

El viaje al pasado se desarrolla en dos dimensiones. Una se ubica en el interior de este visitado y carismático museo, que expone todos los recuerdos de lo que fue una prueba mítica a nivel catalán, español e internacional -las legendarias 24 Horas de resistencia de Montjuïc- con una muestra de aquellas divertidas y poderosas motos de carreras. La otra está ya en la parrilla de salida, porque los responsables del centro han preparado una serie de acontecimientos para recordar aquellos maravillosos tiempos en los que la ciudad y, especialmente, miles demotards, se citaban enla montaña mágica para presenciar la carrera de resistencia más importante de la época, que se desarrolló entre 1955 y 1986, cuando, durante todo un fin de semana, se paralizaba la ciudad.

Las actividades que propone el museo, que lógicamente durarán también unas simbólicas 24 horas (de las 20.00 horas de este viernes a las 20.00 del sábado), contendrán conferencias, visitas especiales, un mercadillo para intercambiar material de la mítica prueba, un concurso fotográfico, actividades infantiles, proyecciones de reportajes originales recuperados de aquellos tiempos por la Penya Motorista Barcelona y, cómo no, una cena de homenaje a los campeones de entonces, que se celebrará el próximo sábado en el restaurante Brasserie Flo, de Barcelona.

Los niños, por ejemplo, podrán disfrutar de actividades en la plaza de la Catedral, y los adultos, de una prueba por relevos en bicicleta eléctrica por el Barri Gòtic que se plantea el reto de emular las 24 Horas del pasado.