Desalojado un edificio 'okupado' en Sants incluido una reforma urbanística

Un amplio dispositivo de la Guardia Urbana de Barcelona ha desalojado este jueves un edificio 'okupado', situado en el número 22 de la calle de Creu Coberta de la capital catalana afectado por un plan de reforma urbanística que tiene como objetivo la prolongación de la calle de Diputació. La evacuación ha culminado sin incidentes hacia las 12.30 horas, tras descolgar e identificar a cinco jóvenes que se habían encadenado en los balcones, momento en el que unos operarios ya han iniciado el derribo del inmueble.

La Guardia Urbana ha pedido el apoyo de los Mossos d'Esquadra para descolgar a los cinco jóvenes, ya que la policía catalana dispone de especialistas en escalada. Agentes de la policía autonómica se han encaramado por la fachada del edificio para cortar las cadenas y descolgarlos.

APOYO DESDE LA CALLE

Los cinco miembros del colectivo okupa,colectivo okupa que no vivían en el inmueble desalojado, habían acudido a protestar por el desalojo de ocho personas de nacionalidad rumana que se dedican a la recogida de chatarra y que ocupaban el edificio afectado por el plan. Los servicios sociales del ayuntamiento les han ofrecido la posibilidad de buscar alojamiento a través del Centro de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB).

Pese al ofrecimiento, algunos miembros del colectivo okupa de Sants han acudido esta mañana hasta el edificio y algunos de ellos se han encadenado en los balcones del mismo para dificultar el desalojo, mientras eran apoyados desde la calle por otro grupo que gritaba consignas como "el ayuntamiento especula y desaloja" y "el turismo mata los barrios".

El desalojo fue instado a la Administración de justicia por parte de la empresa municipal Barcelona Gestió Urbanística (Bagursa), que gestiona los trámites urbanísticos de varios edificios y solares de la zona afectados por un Plan Especial de Reforma Interior (PERI) aprobado en 1994.

REALOJO

Los servicios sociales se han reunido con los ocupantes desde hace meses para ofrecerles una solución que permita su realojo. El último encuentro fue este miércoles, según un portavoz municipal, que destaca la dificultad para alcanzar un acuerdo con el colectivo, entre otros aspectos, porque han entablado negociaciones con diferentes interlocutores, al ser "un colectivo muy fluctuante".

El consistorio ha instado al desalojo a través de la fiscalía y este jueves se ha procedido a la evacuación, con la presencia de varios miembros de los servicios sociales.

El proyecto urbanístico inicial preveía que la calle de Diputació se ampliara para facilitar el tráfico rodado, pero el consistorio está estudiando otras soluciones para que finalmente este tramo se convierta en una vía peatonal o en una calle "pacificada" con una velocidad máxima para los coches de 30 km/h.