BALANCE PROVISIONAL DE LA CAMPAÑA ESTIVAL

Decomisadas en las playas 100.000 bebidas ilegales

Un hombre pasea por la playa cargado con una bandeja de combinados, la pasada primavera.

Un hombre pasea por la playa cargado con una bandeja de combinados, la pasada primavera.

EL PERIÓDICO / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

el equipo encargado de la vigilancia de las playas de la Guardia Urbana de Barcelona durante la temporada estival ha intervenido más de 100.000 bebidas destinadas a la venta irregular, el 53% más que en el mismo periodo del año anterior, según un balance provisional facilitado ayer por el consistorio. El porcentaje de incautaciones se disparó durante el mes de agosto, cuando se intensificó la presencia policial para erradicar, en particular, la venta de mojitos y otros cócteles preparados por sus vendedores en condiciones de poca salubridad. Hasta julio, se habían requisados 63.000 latas y vasos de bebidas, el 27% más que en el 2014.

El Grupo de Playas de la policía barcelonesa, que estará desplegado hasta el próximo 30 de septiembre, cuenta con unos 90 efectivos (15 más que el año pasado), uniformados y de paisano, que patrullan las 10 playas que conforman la fachada marítima de la ciudad. En total, este equipo ha interpuesto en lo que va de verano 10.239 denuncias por venta ambulante (el 77% relacionadas con la venta de bebidas), lo que supone un 26% más que en los meses de verano del año anterior.

Los agentes que cubren la playa han detectado una evolución en  el modus operandi de los lateros, que pasaron de la venta de latas de bebidas frescas a los combinados, explicaba este verano a este diario el intendente portavoz de la policía local Carles Reyner. Primero, los vendedores de playa llevaban consigo todo el material a la venta, pero tras los primeros decomisos optaron por ir poco cargados y mantener la mercancía escondida en alcantarillas o papeleras. Luego la resguardaron en almacenes, pero la policía también dio con ellos. Por eso el siguiente paso ha sido asociarse, al menos en las playas, y trabajar en grupo, utilizando pisos alquilados como base de operaciones.

Pese a la presión ejercida por la policía, la presencia de lateros sigue siendo habitual en los botellones nocturnos que se celebran en las playas de la ciudad.

51 RESCATES DEL AGUA / En el balance estival de la Guardia Urbana, destaca el número de personas rescatadas en el mar, que han pasado de ocho el 2014 a 51 este 2015. El grupo también ha hecho 9.142 actuaciones en los espigones de Barcelona, la mayoría de avisos por la prohibición de bañarse en esta zona por la peligrosidad que comporta o por la prohibición de pescar en horario no permitido.

Además, se han intensificado los mensajes de prevención de seguridad dirigidos a los usuarios de la playa en diferentes idiomas para recordar la peligrosidad de algunas conductas, entre ellas bañarse en los espigones, y en este sentido se han interpuesto 48 denuncias.