DAño medioambiental

Decenas de personas recogen colillas en la Barceloneta

Con este acto reivindicativo sus impulsores pretenden recoger un millón e implicar al ayuntamiento

Plano general de colillas recogidas en la Barceloneta.

Plano general de colillas recogidas en la Barceloneta. / periodico

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La idea es concienciar, pero no que quede solo en eso. Quieren ir más allá y que el Ayuntamiento de Barcelona haga algo al respecto. No soportan ver tantas colillas en el suelo, pese a la instalación hace ya varios años de ceniceros junto a muchas papeleras y al hecho, ignorado por la mayoría y de hecho poco aplicado, de que existe una ordenanza que prohíbe tirar los cigarrillos al suelo. El motivo no es por una cuestión de imagen y de suciedad, que también, es principalmente por el daño al medio ambiente. Por ello, decenas de personas se han propuesto este sábado recoger nada menos que un millón de colillas en el marco de una iniciativa que ha arrancado con 20.000 recogidas, lo equivalente a ocho garrafas de cinco litros, y que se extenderá hasta las 20.00 horas.

Según ha explicado a Europa Press el fundador del 'Movimiento No Más Colillas en el Suelo', Miquel Garau, esta jornada quiere dar visibilidad al problema y hacer un llamamiento al consitorio barcelonés para que tome medidas al respecto. El fundador ha asegurado que espera una participación mínima de 200 personas para realizar lo que ha denominado como "peregrinación" desde las casas de los ciudadanos hacia la playa de la Barceloneta, mientras recogen colillas por las calles de la capital catalana.  

Esperan que la iniciativa ayude a erradicar la percepción de que tirar una colilla en la arena no perjudica al estado de la playa. Datos para quienes aun duden del daño que ocasionan: basta un solo filtro de cigarrillo para contaminar tres litros de agua de mar, además, tienen sustancias tóxicas que, al entrar en contacto con el agua salada, tardan entre cinco y 20 años en desaparecer de forma natural. 

"Barcelona es un cenicero"

Esta actividad busca concienciar a los habitantes de que 'Barcelona es un cenicero', por lo que se propone recoger un millón de colillas y crear "la gran montaña de la vergüenza" para, así, poder denunciar esta situación ante el ayuntamiento.

Se trata de una acción visual para sensibilizar "y que la gente vea la cantidad de suciedad que se acumula en la ciudad", según ha indicado Garau, quien también ha explicado que la iniciativa servirá para reunir a las personas preocupadas y pedir respuesta institucional.

Medidas concretas

En concreto, piden que se realice una campaña municipal que alerte del daño medioambiental que supone tirar colillas al suelo y que se tomen medidas como comenzar a multar a quien lo haga a partir de una fecha concreta.

Además, el fundador del movimiento, que tiene 13.000 seguidores en su página de Facebook, ha recordado que ya existe una ordenanza que establece una multa de 94 euros a quien arroje colillas, aunque ha destacado que ni se aplica ni los fumadores están prevenidos de que pueden ser sancionados.

Por ello, Garau ha anunciado que el próximo 23 de septiembre, el Día Internacional de las Colillas, se organizarán más actividades y se hablará con el consistorio para comenzar a tomar medidas en este sentido.