Cornellà 'underwater'

El chiste es fácil, pero cierto. El submarinismo no se hunde. Lo certifican los siete millones de buceadores que hay en el mundo, casi tres millones en Europa. Los 20 millones de euros que facturan al año los 190 centros de inmersión catalanes. Y los 100 millones de euros que las actividades subacuáticas aportan, anualmente, a la economía catalana. Son cifras que facilita el 16º Salón de la Inmersión -reconvertido ahora en Mediterranean Diving-, que empieza hoy en Fira de Cornellà, donde estará hasta el domingo con 8.000 metros cuadrados de estands y un amplio programa de actividades.

Entre el centenar de expositores nacionales e internacionales que acuden a la cita hay primeras marcas y tiendas especializadas, que presentarán las principales novedades en materia de equipos y material. También agencias de viajes, clubs, escuelas y centros de buceo, que lanzarán sus ofertas para la nueva temporada, con míticos destinos y experiencias de pura adrenalina entre las que este año destacan viajes que combinan safari por Suráfrica con buceo en Mozambique.

La piscina instalada en el recinto acogerá demostraciones de apnea -a cargo de los campeones Miguel Lozano, Santiago Jakas y Mara Torrealba- y bautismos de inmersión para niños guiados por instructores profesionales. Las jornadas técnicas programan charlas y la entrega de un premio a Eduard Amella (Barcelona, 1924), una leyenda viva del submarinismo. La oferta se completa con una muestra de buceo retro, otra de embarcaciones y una tercera que rinde homenaje al buceador Jordi Matero, fallecido en el 2012.