ORIGINAL PROMOCIÓN DE UN MODO DE TRANSPORTE SOSTENIBLE

Cena para dos y una bici

Una página web recoge los locales que permiten a los ciclistas guardar el vehículo sin temer a los robos 'Fixed lover' prepara una aplicación móvil y cuenta ya con 50 bares y restaurantes

'Bike friendly' 8Lara y Guillem, el 13 de mayo, en el restaurante Les tres a la cuina, en Gràcia, integrado en el proyecto Fixed lover.

'Bike friendly' 8Lara y Guillem, el 13 de mayo, en el restaurante Les tres a la cuina, en Gràcia, integrado en el proyecto Fixed lover.

CARLOS MÁRQUEZ DANIEL
BARCELONA

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La seguridad ocupa y preocupa a la bicicleta por encima de todas las cosas. Pero no solo en el aspecto vial, todo eso de la convivencia con otros medios de transporte mucho más poderosos. También como propiedad, pues el robo  es uno de los factores -hay muchos más- que impiden que el ciclismo tenga más solera en las grandes ciudades. Todo el mundo tiene un familiar, amigo o compañero del trabajo que un buen día bajó a la calle y encontró la nada donde antes estaba su bici. Sin matrícula ni modo de localizarlas, a no ser que estén registradas, son un bien muy preciado por los amigos de lo ajeno, pues son tan fáciles de sustraer como de colocar en el suculento mercado de segunda mano. De ello se dio cuenta una joven pareja de Barcelona que ha creado una red de locales amigos, la mayoría de restauración, que permiten que los ciclistas dejen sus máquinas en el interior, en un lugar seguro. Son lugares fixed lover, y ya son 50.

Conozcan a Guille Carmona y a Lara Turon, de 24 y 28 años. Él es músico y ella publicista. Además de la vida, comparten la pasión por las bicicletas de piñón fijo, una modalidad ciclista tan práctica como estética, porque requiere un mantenimiento casi nulo y porque trae adosado todo una karma propio que incluye la personalización de la máquina, desde los pedales hasta el manillar o el cuadro. De ahí que estos jóvenes tuvieran tanto miedo de que volara su álter ego con ruedas: no era solo un tema de dinero, también era una necesidad sentimental.

Voluntad y objetivo

El medio centenar de recintos pueden distinguirse gracias a una pegatina en la puerta que acredita su condición de amigo de la bici. «No se trataba solo de poder entrarla dentro. Para poder incorporarse a nuestra red es necesario poder dejarlas en un lugar seguro, lo más alejado posible de la entrada». Guillem ha dado cumplimiento a todo lo que defendía Steve Jobs. El padre de Apple creó el iPod porque tanto él como sus colaboradores querían para sí mismos un sistema de almacenaje de música cómodo, de gran capacidad y bonito. Este chico quería salir con su bici  a cenar sin que se le encogiera el corazón. Y no solo lo ha conseguido, sino que ha tenido a bien convertir su deseo en un fin común.

La web www.fixedlover.com permite consultar los cerca de 50 locales que ya se han adherido a esta iniciativa que no cuenta, porque tampoco lo han solicitado, con apoyo o soporte de ningún tipo por parte del ayuntamiento, que todavía no ha encontrado la fórmula eficaz para reducir los robos en Barcelona.

La consolidación definitiva del proyecto se hará carne cuando dentro de un mes esté lista la aplicación móvil que, según relata este joven cantante y guitarrista, «permitirá localizar al usuario e indicarle dónde están los locales más cercanos a su posición en los que podrá dejar la bici sin problemas». «Incluso podrá generar sus propios favoritos y preferencias», remata Guillem, que explica que será también «muy útil para los turistas que visitan Barcelona que muchas veces no saben qué hacer con las bicis de alquiler». 

Publicidad gratuita

El usuario, además de situar la oferta de aparcamientos interiores, conocerá las características del local, un detalle nada baladí para los restaurantes que quieran valorar la iniciativa. Además de convertirse en lugares bike friendly, algo que, vistos muchos escaparates, está cada vez más de moda, consiguen una nueva plataforma de promoción que no les exige gran esfuerzo. Y gratis, algo que no abunda. Eso sí, primero deberán pasar el filtro de Lara y Guillem, que si tienen claro que no dejarán su bici en cualquier sitio, tampoco quieren que su tribu tenga que dejar la suya.