LOS PROYECTOS SELECCIONADOS

Heroínas de Cisjordania

La oenegé Suds trabaja para ayudar a consolidar cuatro iniciativas de economía colaborativa en Palestina, donde las mujeres viven doblemente oprimidas

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HELENA LÓPEZ / BARCELONA

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Beita, Beit Fourik, Odala y Awarta son cuatro municipios de Cisjordania de entre mil y 12.000 habitantes. Entre las muchas cosas que tienen en común está el ser pueblos eminentemente agrícolas, cuya principal actividad económica gira en torno a la uva y la aceituna. También, el ser pueblos separados de la ciudad grande más próxima, Nablus, por varios puntos de control, los famosos ‘checkpoints’, y estar rodeados de asentamientos israelís, algo que los aísla y ahoga, llegando a amenazar su propia existencia. El 80% de las tierras fértiles de Beit Fourik fueron confiscadas y ahora forman parte del asentamiento de Mikhora, enclave que empezó siendo un punto militar y ahora es un asentamiento plenamente consolidado.

Tienen algo más en común: todos ellos cuentan con cooperativas de mujeres que, pese a todo, se organizan para intentar sacar adelante a sus familias; es decir, a sus pueblos. El proyecto 'Acceso, defensa y protección de los derechos económicos, sociales y políticos de las mujeres al norte de Cisjordania', de la oenegé SUDS, Internacionalisme, Solidaritat i Feminismes, trabaja con ellas. Es uno de los 110 subvencionados por el Ayuntamiento de Barcelona en la presente convocatoria de la Dirección de Cooperación para la Justicia Global. En su caso, con casi 80.000 euros. 

EL EMPODERAMIENTO, OTRA VEZ CLAVE

Lola Badenes, portavoz de la oenegé, relata que trabajan con la Union of Palestinian Women’s Committees (UPWC), entidad que promueve "la dinamización y promoción de actividades económicas para aumentar los ingresos de la mujer y avanzar en su empoderamiento económico". Si ser palestino es difícil, ser palestina lo es más. Son mujeres que tienen serios problemas para acceder al ámbito público fuera de la familia por las tradiciones que rigen sus comunidades, además, por supuesto, de por las violencias que sufren todos los palestinos en Cisjordania.

Se trata, pues, prosigue la cooperante, de intentar mejorar las condiciones económicas y la participación social y política de las mujeres de estas cooperativas, "reforzando la capacidad de gestión y administración de sus propios proyectos a través de la formación".

La oenegé SUDS se presentó (y ganó) la convocatoria municipal con otro proyecto, este en Cuba; una sociedad con una fuerte cultura machista, homófoba y transfóbica. En este caso, se busca la defensa, sensibilización y promoción de los derechos de colectivos LGTBI a través del fortalecimiento de activistas LGTBI de la red de trabajadores sociales cubana (otra vez se trata de trabajar con los movimientos ya existentes allí). La acciones se realizan en La Habana, Santiago de Cuba, Matanzas, Artemisa y Cienfuegos. La subvención asignada a este proyecto es de 47.353 euros.