Barcelona despedirá con un lleno hotelero el mejor año turístico de su historia

el telón bajará a lo grande el próximo día 31 en Barcelona. La ciudad no solo despedirá el 2010 con un previsible lleno hotelero, sino que despedirá el que habrá sido el mejor año turístico de su historia, si la meteorología o algún desmán de los controladores no impiden el récord. Según los datos oficiales que maneja Turismo de Barcelona, el balance final del año rozará los 14 millones de pernoctaciones, con siete millones de visitantes y un crecimiento en torno al 8% en los dos ámbitos.

Si los pronósticos se cumplen, la capital catalana superará las marcas que batió en el 2007, antes de que la crisis propinase un golpe bajo a la ascendente curva de Barcelona, que el año pasado se quedó en los 6,5 millones de viajeros. En Turismo de Barcelona estudian las cifras con cautela, pero con la certeza de algunos récords ya batidos. Por ejemplo, es la primera vez en la historia que la ciudad recibe dos meses a más de 700.000 visitantes. En concreto, las puntas fueron en mayo y octubre.

Pero además, ha habido tres meses en los que se han sumado más de 1,4 millones de pernoctaciones. La noticia es una inyección moral para el sector, aunque bien es cierto que el tirón hotelero de la ciudad va de la mano de tarifas ajustadas, con lo que las cifras de beneficios probablemente no vayan parejas. Barcelona no solo está de moda, sino que tiene una de las mejores y más renovadas plantas hoteleras del continente.

El esprint final del año está marcado, como es habitual, por un diciembre con bajo volumen de viajeros, ya que en Navidad las preferencias son hogareñas, pero con una eclosión de reservas de cara a Fin de Año. En los últimos años la capital catalana se ha ido revalorizando como destino para esa fecha, con un clima más amable que en otras metrópolis europeas y buenas ofertas de gastronomía y ocio. Pere Duran, director de Turismo de Barcelona, no duda de que la Nochevieja será de llenos, y distintos hoteleros consultados coinciden en el vaticinio.

ESCAPADA LARGA / El hecho de que caiga en viernes propiciará también una escapada larga para muchos viajeros. Hoteles como el lujoso Mandarin Oriental ya han colgado el completo para esa fecha, a base de extranjeros, pese a exigir una pernoctación mínima de tres noches. Otro tanto sucede con su restaurante Blanc, sin una sola plaza libre. En otro establecimiento emblemático, el Arts, confirman una despedida de año hasta la bandera.

La web oficial de hoteles de la ciudad todavía oferta plazas en esas fechas, aunque algunas de las tarifas ya denotan que la demanda es alta. El sector respira tras el que fue un inicio de año muy flojo, con más de la mitad de las habitaciones sin ocupar durante enero y febrero.

No obstante, fuentes del gremio hotelero indican que la tendencia se invirtió a partir de la primavera y el auge ha sido continuado. En el consorcio Turismo de Barcelona destacan el otoño redondo que ha vivido la ciudad, con una ocupación del 88% en los meses de septiembre y octubre, tras un julio en que se alcanzó el 90%. «El año acabará unos 3,8 puntos por encima del 2009», apunta Duran. La guinda complementaria es la calidad del turismo. Y es que los hoteles de lujo también están viviendo unos meses dorados. El director del recién renovado Palace, Juan Valls, apunta que el regreso de este clásico ha sido recibido con unas cuotas de ocupación muy altas y superiores a lo común. Considera que ha sido un año excelente para el turismo local, que en su caso está capitaneado por estadounidenses.

EL 3% MÁS DE CAMAS / A falta de cerrar el año, el recorrido invita a pensar que se superarán los 13,8 millones de visitantes (frente a los 13,6 del mítico 2007), aunque la ocupación media no será tan alta como ese año, entre otras cosas porque la capital catalana sigue ganando plazas hoteleras y este año acabará con un 3% más que el anterior. En volumen de viajeros, también se espera rebasar los siete millones, aunque queda por ver si se alcanzarán los 7,1 de hace tres años, tras un 2009 que se quedó en 6,47 millones.