NUEVA RED DE TRANSPORTE RÁPIDO EN SUPERFICIE

TMB planea estrenar dos líneas de Retbus en enero

El servicio puede empezar por la Ronda del Mig y en el trazado entre Sants y Sarrià

CARLOS MÁRQUEZ DANIEL / Barcelona

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El autobús urbano, heredero de la red de tranvías de Barcelona, está a las puertas de vivir una revolución cuyo cometido será a aumentar la denostada velocidad comercial a través de un esquema ortogonal con seis trazados horizontales y cinco verticales. Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), según ha podido saber este diario, prepara el estreno de dos líneas para principios del 2011, una que uniría Zona Universitària y Fabra i Puig por la Ronda del Mig, imitando el recorrido del 74, y otra entre plaza de Espanya y Sarrià, similar al trazado de la línea 30.

Dídac Pestaña, vicepresidente de TMB, aseguró ayer que la empresa trabaja «a pleno rendimiento» para implantar el Retbus cuanto antes y confirmó que la compañía no tiene previsto, por ahora, hacer un pedido de autobuses de grandes dimensiones, con lo que el nuevo transporte usará los vehículos articulados habituales. Fuentes de TMB concretaron que estos coches «se diferenciarán del resto con facilidad» -serán de otro color- para que se distingan de uno convencional.

SIN IMPROVISACIÓN / Pestaña definió la nueva red como un «proyecto complejo en el que no se puede improvisar» y admitió que el eje de la Ronda del Mig es «uno de los prioritarios». Fuentes cercanas a TMB, sin embargo, han asegurado a este diario que sí será la primera línea en pruebas, juntamente a la vertical entre Sants y Via Augusta, y que probablemente ambas estarán activas en enero.

El despliegue de las 11 líneas podría obligar, según el caso, a recortar aceras, mover elementos de la vía pública, colocar nuevas señales, suavizar los giros o modificar la prioridad de paso en los cruces. La implantación de los 270 autobuses articulados -algunos de ellos, de 24 metros de largo, inéditos en Barcelona- no será efectiva hasta dentro de dos o tres años. Por ahora, TMB no se plantea ampliar la plantilla, aunque no lo descarta conforme vayan entrando en funcionamiento más líneas.

Pestaña se refirió también a la promesa socialista de mantener el metro abierto los viernes por la noche en caso de ganar las elecciones del 28-N. Dijo que la empresa está «técnicamente preparada» para hacer frente a esta demanda cuyo coste, tal y como sucedió con la decisión, en el 2007, de mantener el subterráneo operativo los sábados por noche, debería correr a cargo de la Generalitat, no de TMB.