TMB promete un metro adaptado a los discapacitados en el 2012

Arrancar un compromiso político debería ser lo más normal del mundo. Para los gestores de lo público, sin embargo, vaticinar fechas es una práctica arriesgada, por cuanto uno debe dar cuenta de los resultados una vez superado el plazo. Hoy pueden añadir otra interesante promesa a seguir: toda la red de metro será accesible en el 2012. Responde de ello el vicepresidente ejecutivo de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), Dídac Pestaña.

La capital catalana puede sacar pecho cuando se habla de la adaptación de bus y metro para las personas con discapacidad. Con todos los autobuses con la plataforma baja incluida y el 82% de las estaciones de metro accesibles, no es de extrañar que Pestaña se aventurara ayer a hablar de «referente europeo» de la materia. La clave, expuso, es que la integración forma parte de «la política de la empresa» y aseguró que TMB «no se conforma con celebrar y recordar» lo que ya se ha conseguido, sino que se pregunta qué falta por hacer para darse cuenta de que falta «mucho camino por recorrer».

En el mismo sentido se expresó Assumpta Escarp, presidenta de TMB y concejala de Seguridad, que pudo olvidar el sumario de Ciutat Vella por un rato para dedicarse a hablar de autobuses y metros. La tercera teniente de alcalde, ante un auditorio repleto de miembros de asociaciones de personas con discapacidad, se mojó más de lo previsible para asegurar que el nuevo plan director de accesibilidad universal de TMB es un «compromiso de obligado cumplimiento». Y mirando a la cara del público, recordó que los presentes eran «los auditores» de que todo este proyecto, el de eliminar todas las barreras arquitectónicas del transporte público, sea posible.

FRANJAS POLÉMICAS / Dentro de las medidas positivas que ya están en marcha, TMB incluye la instalación decaminosde caucho para invidentes en las paradas de bus, a pesar de que estas franjas rugosas padecen problemas evidentes, ya sea un pegamento deficiente, un relieve que las convierte en obstáculo o un material que, cuando se moja, más vale evitarlo. Escarp aseguró que está previsto un «plan de mantenimiento específico», para el que, concretó, ya hay partida presupuestaria.

Pestaña aseguró que este tema está «en manos del ayuntamiento», léase del concejal de Movilidad, Francesc Narváez, y admitió que el hecho de que se despeguen es «preo-

cupante». «Intentaremos resolverlo, y si al final vemos que es de difícil solución, entonces habrá que tomar una decisión», concluyó. ¿Cuál? Pregunten en el próximo mandato.