Los hoteleros piden poder atender las denuncias de robos a turistas

Mientras otros sectores económicos se tambalean por el zarpazo de la crisis, el turismo sigue representando el 13% el PIB de Barcelona, y genera 25.000 empleos directos y 100.000 indirectos. Con esta premisa, el máximo representante de los hoteleros locales, Jordi Clos, se sintió ayer con derecho a dar un puñetazo sobre la mesa y exigir con urgencia medidas contra la inseguridad y un mayor mantenimiento de la ciudad, al considerar que hay que mejorar su calidad y la imagen que vende al mundo. «No nos creemos que hemos de vivir del turismo», dijo. Y pidió que las denuncias por robos, que siguen omnipresentes, se puedan tramitar en los propios hoteles para mejorar la atención al visitante y paliar la alarma que la inseguridad genera. Los Mossos, no obstante, no se plantean incorporar esta vía de denuncias.

Como es tradicional en su comparencia bianual, Clos pasó examen a Barcelona, o mejor dicho, a la ciudad que ven los que vienen de viaje. El hotelero se congratuló por las medidas implantadas por el ayuntamiento en materia de iluminación, control de la indumentaria en la vía pública y el coto a los excesos en la Rambla, denunciados en anteriores ocasiones. El suspenso en este caso recayó en la asignatura de la seguridad, que sigue siendo un lastre para la ciudad. El presidente del Gremi d'Hotels local aseguró que los robos son diarios, tanto fuera de los hoteles como incluso en las recepciones o restaurantes, donde los ladrones se hacen pasar por clientes.

Pero sobre todo mostró su preocupación por el eco que está tomando el tema en los foros de viajeros y por la imagen amenazadora que se proyecta. Pese a reconocer el esfuerzo del ayuntamiento en reclamar medidas contra la reincidencia, urgió a incorporar otras fórmulas como que los hoteles puedan tramitar las denuncias por delitos. De ese modo, el visitante no perdería tanto tiempo en las colas en comisaría, no tendría ocasión de comprobar el alto volumen de delitos y sería atendido con garantías en su idioma.

Hace dos años el gremio ya planteó a diversas instituciones esta necesidad, sin éxito. Por contra, la medida se implantó en Madrid, por lo que Clos ha decidido emprender de nuevo una cruzada al respecto. Fuentes de los Mossos, no obstante, indicaron ayer que no se plantean incorporar este sistema de denuncia, ni entra en la estrategia de colaboración en marcha con los hoteleros. En la actualidad hay dispositivos especiales ante grandes citas que llenan los hoteles, agentes que trabajan con los establecimientos y suficientes formas de denuncia, consideran, informaAntonio Baquero.

También atacó al mantenimiento de la ciudad, poniendo el dedo en la llaga sobre la degradación de la Diagonal (que necesita arreglos aunque no se reforme, dijo) y del paseo de Gràcia. Destacó que en la revista de tendenciasMonocleBarcelona ha bajado siete puestos en dos años (es 17ª) en su lista de las 25 mejores ciudades, donde se valora la calidad.

REPUNTE DE VISITANTES / El empresario hizo balance de la marcha del año. Se congratuló de que en el primer semestre la ocupación llegó al 66,68% de media, lo que supone 2,4 puntos más que el año pasado. Los mejores resultados se han logrado de abril a junio, donde la ocupación se ha acercó al 77%. No obstante, de cara a julio y agosto se prevé un 74% de media, frente al 79% del año pasado. La bajada no es de turistas, sino que se debe a que en ese periodo del 2009 la ciudad acogió un importante congreso de cardiología que disparó las reservas hoteleras.

Los datos siguen siendo buenos en comparación con los sustos que viven otros sectores, pero no solo responden al atractivo de la ciudad, sino también al recorte de precios (bajan otro 4,76% y sitúan el precio medio de una habitación en 100 euros), y a la «extraordinaria» calidad de la creciente oferta hotelera.