Movilización por el traslado de una guardería a un local sombrío

Los alumnos de la Escola Bressol Municipal Puigmal echarán de menos los recreos en la Ciutadella. Pese a las evidentes deficiencias del local que les ha acogido durante las últimas tres décadas –no dispone de algo tan básico como un patio donde jugar–,

los niños acuden a diario al vecino parque, «un lujo» según la mayoría de los padres. En el Palau Alòs, donde tienen previsto trasladarles en cuanto acabe su rehabilitación, los pequeños ganan patio propio, pero pierden algo que los padres consideran fundamental: sol. La escuela está situada en la esquina más oscura del edificio, situado en la ya de por si sombría calle de Sant Pere més Baix, y al patio no le da el sol porque el propio edifico le hace sombra. «En un distrito tan denso como este, muchos de los niños viven en pisos con poca luz. No les podemos negar el sol también en el colegio», reflexiona Isabel Martínez, presidenta del AMPA del centro. Esta tarde han organizado una merienda popular reivindicativa en el Pou de la Figuera, frente al cuestionado emplazamiento.

El jueves, una delegación de pequeños alumnos entregaron su queja al Síndic de Greuges, acompañada de las firmas recogidas en todas las guarderías del distrito y de un dosier técnico donde evalúan los serios inconvenientes que le encuentran al proyecto actual, del que, además de la falta de luz solar, critican su verticalidad, «en una distribución en tres inoperantes plantas».

Los padres, quienes también denuncian que llevan desde diciembre pidiendo reuniones con los sucesivos concejales del distrito --tres distintos, en estos meses-- para presentarles sus inquietudes sin recibir respuesta, no están solos. Al manifiesto que entregaron al Síndic se han adherido desde urbanistas y arquitectos de renombre hasta profesores de Ciencias de la Educación y pediatras, máximos conocedores de las necesidades de los niños.

Maria Mas, presidenta de la asociación de vecinos, entidad que también apoya la lucha de estos padres, apunta la existencia de otros espacios en el barrio «más adecuados» para acoger una guardería, como los edificios en semidesuso en el parque de la Ciutadella, como el invernadero o el antiguo museo de ciencias, trasladado al Fòrum. Algo que, además, haría posible que la escuela no se desvinculara del parque.

El AMPA, quien pone sobre la mesa el debate sobre «la lógica» del planteamiento urbanístico del distrito, actualmente en los juzgados. Según fuentes municipales, la propuesta cumple con todos los requisitos legales y con las directrices técnicas. También destacan que con el traslado al nuevo emplazamiento se ganarán 14 nuevas plazas «en una zona muy necesitada».