LA PRETEMPORADA AZULGRANA

Tropiezo a palos

El Barça sucumbe en EEUU ante el United en un partido en el que lanzó tres disparos al poste

Darmian derriba a Suárez en una acción del partido de ayer en San Francisco.

Darmian derriba a Suárez en una acción del partido de ayer en San Francisco.

JOAN DOMÈNECH / SAN FRANCISCO (Enviado especial)

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Una tradición no escrita dice que el Barça pierde los amistosos contra el United cuando se encuentran en Estados Unidos. El azar intervino para que se cumpliera el tercer episodio de tal costumbre. El poste escupió tres remates azulgranas que habrían podido evitar una derrota (1-3) que solo se vio en el marcador. El United no fue mejor que el Barça ni dispuso de más ocasiones, ni, seguramente, mereció el triunfo excepto por el hecho de haber sido mucho más certero que el Barça.

Otro gallo habría cantado si Suárez hubiera transformado una falta directa (m. 3) o si el uruguayo hubiera podido rectificar el mínimo triunfo inglés (Rooney empujó a Adriano en un córner para cabecear) antes del descanso con un segundo zurdazo al otro poste. Y quién sabe si el cabezazo de Munir en la segunda mitad habría reactivado una emoción que decaía con el 0-2 y el aluvión de sustituciones pasada la hora de partido que descontroló el encuentro: en el último minuto se marcaron dos goles.

'IMPARABLES' DETENIDOS / En cualquier caso, Luis Enrique y Van Gaal pudieron marcharse conformes del Levi's Stadium con lo aportado por sus muchachos a tenor de la preparación acumulada. Uno venció en el juego y el otro en el marcador. Si un día, dentro de unos meses, se enfrentan con puntos o eliminatoria de por medio, el partido será muy distinto. Y posiblemente el resultado también cambie si el tridente del Barça tiene tres puntas.

Los imparables del verano, el lema que antecede al Barça en su gira por Estados Unidos, se detuvieron en la segunda escala. Ante un adversario de entidad. El nombre del rival inspiró a los dos entrenadores a presentar sus mejores onces. Solo faltó Rakitic en la alineación azulgrana, y apareció tras el descanso para dar algo de determinación al equipo en los metros finales del ataque. Sergi Roberto quedó señalado por su inocencia en dos pelotas profundas (de las pocas que hubo).

Ese fue uno de los mayores defectos azulgranas. El mediocampista acabó de lateral derecho por el relevo de Adriano. El equipo con más laterales derechos del mundo (cuatro: Alves, Vidal, Douglas y Adriano) tuvo que improvisar uno a los 10 días de iniciar los entrenamientos.

UN EQUIPO PARADO / Demasiado parado estuvo el equipo en el campo. Demasiadas pelotas se pidieron al pie, seguramente para extremar el control del juego y también a consecuencia del calor. Nadie quiso regalar un desmarque en profundidad, nadie se pegó una carrera de más por el miedo a pagar las consecuencias. De estación en estación se movió la bola, y tampoco sirvieron los pases largos cruzados de Vermaelen para mover a los ingleses de sitio. El central belga acertó los dos primeros y falló los siguientes.

Al United le bastó con estar bien posicionado para evitar apuros,  construyendo desde atrás aunque sin causar daños excepto un barullo en el área salvado a la desesperada entre Adriano y Piqué. Depay y Rooney estuvieron cerca uno del otro y pudieron combinar en el área; Suárez, en cambio, se sintió solo y con motivos. Rafinha, pegado a la banda, ralentizó el juego y a Pedro le falta una notable inyección de autoestima tratándose de un futbolista con siete temporadas en el primer equipo. Tal vez crea que, por muchos méritos que contraiga, su destino está más que escrito.