LA PRETEMPORADA AZULGRANA

Recuperar la ilusión

Bartomeu y Zubi saludan a los jugadores, ayer en la ciudad deportiva.

Bartomeu y Zubi saludan a los jugadores, ayer en la ciudad deportiva.

JORDI TIÓ
BARCELONA

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Una de las voces más calmadas y sosegadas del

Barça, y de mayor autoridad en el vestuario, se escuchó de nuevo ayer para lanzar un mensaje de optimismo y compromiso. «Cuando vienes de un año sin títulos, lo que quieres es volver a ganar. Tenemos mucha ilusión de hacer un gran año, de volver a disfrutar como equipo y de hacer disfrutar a la afición», dijo Andrés Iniesta, uno de los capitanes que ha adquirido más galones si cabe tras la marcha de Puyol y Valdés, y con Xavi metido en una fase de transición mientras decide, a final de año, si se marcha o se queda definitivamente.

Por eso Iniesta, el tipo que suele dar la cara en los momentos complicados, irrumpió para dar su opinión tras la vuelta del grueso de las vacas sagradas. La cuestión era sentar las bases de la campaña. «Empezamos de cero. Esperamos hacer una gran temporada desde el inicio y no cometer errores. Hay que ser mejores que el año pasado», reclamó el centrocampista, que no quiso hacer un paralelismo con la situación de cambio vivida también en el 2008, con la llegada de un nuevo entrenador (Pep Guardiola) y muchos fichajes en la plantilla. «Puede que haya algunas similitudes, pero cada situación es distinta».

SEGUIR AL LÍDER / Esa temporada llegó un entrenador con las ideas muy claras. En esto, la historia parece que se repite. «Luis Enrique tiene las cosas claras, algo muy importante porque los jugadores hemos de creer en el entrenador y en lo que nos dice», destacó del técnico, al que le une una simpática anécdota que se remonta a 13 años atrás, cuando el ahora preparador ya era un futbolista consagrado, y Andrés, un chaval del filial que empezaba a entrenar con los mayores. «Me llamaron para entrenar con el primer equipo por primera vez y no sabía dónde estaba el vestuario. Entonces me encontré con Luis Enrique, que me subió a su coche y me llevó. Fue el primer jugador del primer equipo con el que me topé. Desde entonces, hemos tenido una muy buena relación y estoy encantado de que esté aquí».

NUEVOS ROLES / El jugador de Fuentealbilla, que con 30 años inicia su 13ª temporada en el primer equipo, habló también de las nuevas incorporaciones -«el club ha buscado lo que le podía faltar al equipo; Rakitic, Mathieu y Bravo vienen a sumar»- y también de cómo la plantilla tiene que afrontar la ausencia de dos capitanes como Puyol y Valdés. «Cada uno tiene que ser líder de sí mismo y aportar cosas. Hay algunos que llevamos más tiempo que otros, pero este grupo, durante todos estos años, ha contado con un vestuario muy sano y unido», valoró Iniesta, que ve a gente capaz de asumir ese rol. «Mascherano podría ser un grandísimo capitán, ya lo ha sido con Argentina». Una opinión que coincide con la del entrenador. «También Leo puede serlo», añadió.

Iniesta, que sigue muy en contacto con su hermano Valdés -«hablamos de su rodilla, todo marcha bien»-, también echará de menos a una persona que llevaba más de 30 años en el vestuario. «Es un amigo, solo tengo palabras positivas por cómo me ha tratado. Es una persona muy querida en el vestuario y hay que agradecerle todos estos años. Ha sido un ejemplo para todos y ha dejado huella entre nosotros», afirmó de Txema Corbella, el utilero despedido por el club hace unas semanas.

VISITA DE BARTOMEU / La sesión de entrenamiento de ayer por la mañana contó con la presencia del presidente Josep Maria Bartomeu y del director deportivo, Andoni Zubizarreta, que saludaron uno a uno a todos los jugadores y técnicos antes de iniciar la sesión en la ciudad deportiva.