"La Masia no se toca"

"Tenemos que decir basta, están atacando a nuestro modelo, lo defenderemos hasta el último momento. La Masia no se toca, La Masia no se toca, estamos viviendo una gran injusticia. Están tocando nuestra esencia". Josep Maria Bartomeu, el presidente del Barcelona, ha alzado la voz para denunciar "la gran injusticia" que vive el club por la prohibición de la FIFA de fichar jugadores hasta el 2015 debido a que ha incumplido la normativa de la protección de menores. "No he hablado con Blatter todavía, pero sí con el secretario general Jerome Valcke, la FIFA se ha mostrado sorprendida, la medida es excesiva", ha revelado el dirigente azulgrana.

"El Barça no se ha saltado la normativa. Cuando nos han dicho que no podían jugar con nosotros, han dejado de jugar. Eso sucedió hace un año largo, entrenan con nosotros, sus padres quieren que vivan aquí porque no hay otra mejor educación para sus hijos que la que están recibiendo aquí", ha recalcado Bartomeu , insistiendo en que el Barcelona ha sido investigado por la FIFA en 37 jóvenes, de los cuales 9, según el organismo internacional, han incumplido esa normativa.

Caso a caso

"Aquí las cosas se hacen muy bien. Quizá haya alguien al que no le gusta y quiere estropearlo", ha dicho Bartomeu, tras asegurar que "todo es muy extraño, tenemos evidencias muy importantes de que se quiere hacer daño al Barça, lo estamos investigando. El Barça no ha hecho nada mal", ha precisado el presidente del Barcelona, quien ha recordado que el club tiene 278 niños en la cantera procedentes de 18 países diferentes. Había sido Rosell quien llevaba el peso de las negociaciones hasta que en febrero asumió esa responsabilidad. "Estamos de acuerdo con la norma, se debe perseguir a la gente que hace uso fraudulento de los niños. Pero pedimos a la FIFA como club que trabaja para mejorar las condiciones que haga una excepción y se mire caso a caso", ha subrayado.

"Somos víctimas de una gran injusticia, nos preocupamos de los niños, de su formación, somos un modelo a seguir", ha remarcado Bartomeu, recordando que "hay una denuncia anónima por Lee, un jugador coreano, que creía que estaba jugando irregular. Por eso, la FIFA actuó". Dicho esto, Bartomeu ha lanzado un duro mensaje. "Quiero decir al socio, a los aficionados de todo el mundo, a los niños, a sus padres, a todos, que estamos indignados".