FÚTBOL. LA SITUACIÓN AZULGRANA

Mascherano: "Messi no dijo nada raro, yo lo veo feliz aquí"

Luis Enrique tiene, por vez primera, a toda la plantilla para encarar un mes determinante

Iniesta, ante Xavi y Pedro, en el entrenamiento de ayer del Barça en la ciudad deportiva.

Iniesta, ante Xavi y Pedro, en el entrenamiento de ayer del Barça en la ciudad deportiva.

MARCOS LÓPEZ / BARCELONA

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Habló ayer Mascherano. Y todos le escucharon con atención. Tanto fuera de la ciudad deportiva de Sant Joan Despí como en el interior de ese recinto, donde Luis Enrique ha tenido dos semanas de reflexión y análisis en la búsqueda de la fórmula que reactive al Barça. Habló Mascherano de Messi avalado por la amistad que les une. Viven juntos en el Barcelona y también en la selección argentina. «No dijo nada raro, yo lo veo feliz aquí y allí», sentenció el Jefecito cuando le comentaron si estaba preocupado por el futuro de la estrella. O sea, de su gran amigo. Habló también Mascherano del equipo, enfrentado a diario con el maravilloso recuerdo de lo que fue -uno de los más grandes de la historia, y no del Barça sino del fútbol mundial- en la búsqueda constante de ser lo que quiere ser.

«Aquella fue una época gloriosa», recordó Mascherano. Este club tiene más de 100 años y todos dicen que fue la mejor. El listón está alto, pero yo no me resigno», proclamó el jugador argentino, seguro de que la «idea de juego» se mantiene, pero se están creando «nuevo matices». En eso anda Luis Enrique. Y con Messi como pilar indiscutible. Así fue con Guardiola, entonces de falso nueve, así será ahora con el técnico asturiano, obligado a rediseñar totalmente el ataque del Barça para que la cohabitación entre Messi, Suárez y Neymar sea realmente tan productiva como evocan sus lujosos nombres.

23 JUGADORES MÁS MUNIR / Por ahora, las tres estrellas se están conociendo. Apenas han jugado cuatro partidos juntos. Y solo dos de ellos completos: la derrota con el Celta y el triunfo sobre el Ajax. Mientras Messi sostenía desde Manchester que no se veía jugando toda la vida en el Camp Nou, Luis Enrique daba vueltas al plan para encajar a las tres bestias justo en el momento en que el calendario se empina hasta el final del 2014, con nueve partidos claves.

Al menos, el técnico tiene una gran ventaja. Ayer, por vez primera desde que su Barça se puso en marcha en julio pasado, tuvo a la plantilla al completo sobre el césped, incluido Vermaelen (el único que no ha debutado aún), completando su tercera sesión con el grupo. Eran los 23 que hay en la nómina y el joven Munir, del filial, el último que queda del inicio del proyecto porque tanto Sandro, el más usado, como Samper, la opción joven para relevarar a Busquets, han vuelto al Mini.

INIESTA, MATHIEU Y RAFINHA, A PUNTO / De ahí la felicidad del técnico, que vio ayer a Iniesta por vez primera desde su lesión en el Bernabéu (25 de octubre) trabajar con el grupo. Aún no tiene el alta. Tampoco Mathieu. Ni Rafinha. Pero los tres están a punto -quizá reciban hoy mismo esa autorización médica- para enfrentarse a ese calendario en el que el Barça se ha puesto la obligación, como dijo Mascherano, de «ganarlo todo» para despedir el 2014 en calma. Cualquier tropiezo, tras las derrotas del Madrid y Celta, además del mal juego en la sufrida última victoria contra el Almería, envenenarían más el ambiente. Luis Enrique lo sabe; la plantilla, también. «No es época de buscar excusas, sabemos que hay que mejorar», dijo el Jefecito.

Por eso, resulta imprescindible conectar a los tres delanteros y, al tiempo, dotar de equilibrio al equipo para que la idea de juego sea reconocible. Con Messi como gran bandera, mientras otros detalles, algunos de gran calado -la suplencia de Piqué, que lleva tres partidos consecutivos sin jugar ni un minuto- y otros de menos peso -Montoya es ya el cuarto lateral derecho por detrás de Alves, Adriano y Douglas- se vayan resolviendo.

SUPERAR A ZARRA / «¿Vos asegura que Leo tiene inquietudes, problemas o está molesto con el Barça?», inquirió Mascherano a una periodista. «¿Dónde lo leíste? Yo no lo leí. Yo siempre escuché agradecimientos al Barcelona. Es imposible desprestigiar a uno de los mejores jugadores de la historia», recalcó uno de los mejores amigos de Leo en la plantilla. «Su conducta fue siempre ejemplar. Yo no dudo de él», añadió luego el defensa argentino, quien eludió comparar a Martino con Luis Enrique. «El que está fuera siempre es el mejor, eso es más viejo que el sol».

Mientras, llegado de su periplo con Argentina, ahora más de extremo que de falso nueve, Messi se asoma mañana al Camp Nou para batir a Zarra como máximo goleador de la historia de la Liga. Con un tanto lo iguala (251). Con dos lo supera.