EL ESTRENO. EL '4', ACLAMADO

Cesc disfruta de su primera noche de gloria en su debut

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Cesc sonreía sin parar. Su sueño, el que abrigaba desde pequeño y que parecía imposible cuando, con 16 años, puso rumbo a Londres, se había cumplido. Tras tres años de culebrón y cuatro meses después de estrenarse en el Camp Nou, como capitán del Arsenal, debutó en su casa como azulgrana.

El gesto se le iluminó cuando Guardiola le mandó calentar en el minuto 57 y el Camp Nou estalló y empezó a corear su nombre. Veinte minutos después el técnico le llamaba para salir. Mientras escuchaba las instrucciones de Guardiola y Tito Vilanova, se le cambió el gesto con el empate de Benzema. Pese al bajón, la hinchada azulgrana estalló con su entrada en el campo a falta de solo siete minutos para el final del tiempo reglamentario.

Se colocó como interior izquierdo, desplazando a Iniesta al extremo, y en una de sus primera jugadas, algo desorientado, chocó con Piqué. Pero, convertido en extremo derecho, inició la jugada que Messi convirtió en el 3-2. Corrió a abrazarse con su compañero en el histórico cadete B. Dos minutos después otra conexión de los dos amigos de infancia casi termina en el cuarto. Con el tiempo casi extinguido probó la frustración blanca en una entrada que le costó la roja a Marcelo y que derivó en tangana.

«Cada uno juega al fútbol como puede o quiere -comentó Cesc sobre la actitud madridista-. Estoy muy feliz». En tres días, Cesc ya ha conseguido la mitad de títulos que en ocho años en el Arsenal. Si con losgunnerssolo celebró dos títulos (la Copa y la Supercopa inglesas), ayer conquistó la Supercopa de España. Dentro de ocho días, en Mónaco ante el Oporto, podría lograr el segundo: la Supercopa de Europa. ROGER PASCUAL