El Barça admite que en La Masia ya no hay nivel

Tres jóvenes ha incorporado el Barça de Luis Enrique al nuevo proyecto que se pone en marcha la próxima semana. Ninguno viene del Miniestadi, la tradicional fábrica de talentos del club, signo de que el modelo deportivo está cambiando. No hay talento en casa y se busca fuera, obligando además a la directiva a emprender fuertes inversiones económicas para comprar piezas que no son indiscutibles para el once inicial.

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 El Barça ha invertido 44,75 millones de euros en tres jóvenes para rellenar, como dijo el propio Robert Fernández, «el armario de la plantilla». Miraron abajo los técnicos y no tuvieron respuestas para lo que pedía y necesitaba Luis Enrique.

PRIMERO, CESIÓN; LUEGO VUELTA

El primer gesto de esa nueva política deportiva fue el fichaje del interior gallego Denis Suárez (22 años), quien se tuvo que marchar del filial para encontrar su sitio en el fútbol de élite con dos exitosas cesiones en el Sevilla y Villarreal, regresando al Camp Nou por la misma ruta que utilizaron, entre otros, Jordi Alba (fichado del Valencia tras pertenecer a las categorías inferiores azulgranas) y Rafinha, a quien una cesión en el Celta le vino de maravilla para volver.

"Desgraciadamente no tenemos la suerte, o como se quiera decir, de tener una generación de jugadores importantes de nivel" (Robert Fernández) 

Los otros dos talentos jóvenes (Digne y Umtiti, ambos de 22 también) proceden de la cantera francesa. Cada uno, eso sí, con caminos diferentes. El lateral viene de un gran año en el Roma, cedido por el París SG, y el central aparece en el Camp Nou tras brillar con el Olympique de Lyón. En La Masia, como certificó Robert Fernández, el secretario técnico azulgrana,Robert Fernández ya «no hay nivel», esa fue su palabra, para subir directamente al primer equipo.

BUENOS, PERO NO LO SUFICIENTE

El Barça B de Gerard  además, se ha convertido en un inacabable ir y venir de jugadores de Segunda B donde los chicos que proceden del juvenil azulgrana son ya minoría. «Durante estos dos últimos yo he asistido mucho a la escuela», dijo Robert en referencia a su seguimiento a la cantera. «Desgraciadamente no tenemos la suerte, o como se quiera decir, de tener una generación importante de jugadores de nivel», confesó el ejecutivo del Barça, recalcando, eso sí, que «hay futbolistas buenos». Son buenos, pero no lo suficiente para pisar el Camp Nou.

"Si tuviéramos jugadores que en un año o dos pensáramos que estarían en el primer equipo tendríamos una estrategia diferente" (Robert Fernández)

«Ahora mismo no tenemos esa capacidad, que sería fantástica», admitió sobre la falta de piezas adecuadas para complacer a Luis Enrique. «En los últimos años hemos incorporado jugadores de la cantera que han sido luego top a nivel mundial. Pero, desgraciadamente, no los tenemos y tras analizar con tranquilidad lo que hay, nos vemos en la obligación de hacer otras cosas».

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El problema no es solo de esta temporada. «Si tuviéramos jugadores que en un año o dos pensáramos que estarían en el primer equipo tendríamos una estrategia diferente», sentenció Robert, mientras el club achaca a la sentencia de la FIFA («nos afectó mucho a la base», dijo Albert Soler, director de deportes profesionales) ese grave problema. 

«Estamos súper orgullosos del trabajo que se hace en La Masia, es un trabajo admirable y hasta envidiable. Ha coincidido estos años una generación única, pero si nos conformamos con tener un modelo como el Athletic, con todos de la casa y de tanto en tanto ganar una Copa del Rey, lo asumimos y ya está», reflexionó Jordi Mestre, vicepresidente deportivo. Busquets, que venía de Tercera División, y Sergi Roberto son los últimos que llegaron del Mini.