El Barça vuelve a la dinámica perdedora en Vitoria

El triunfo en Andorra, hace una semana, fue la excepción a una norma, que empieza a retratar al Barça esta temporada. Fuera de casa, el equipo azulgrana ofrece una imagen vulgar, es un conjunto descentrado, poco competitivo y en la cancha del Laboral Kutxa ha vuelto a la dinámica perdedora dando otro paso atrás en la Liga (103-94).

Es la sexta derrota en el campeonato para el Barça, la quinta en los últimos seis encuentros como visitante en la ACB, a la que podrían añadirse las dos vividas en el Top 16 de la Euroliga (en Berlín y en Tel-Aviv), para completar un balance desolador en las últimas semanas.

Ya no es solo un síntoma. Es una enfermedad, a la que los responsables del Barça deberían encontrar remedio, aunque visto lo que ha ocurrido en Vitoria, hay numerosas razones para explicarlo, algunas de peso, más allá de las ausencias de Navarro y Oleson, dos jugadores que ejercen su liderazgo en la cancha.

EQUIPO BLANDO, POCO AGRESIVO

Aunque la estadística sitúa al Barça como el mejor equipo defensivo de la Liga, buena parte de los problemas del equipo nacen en esa faceta. Encajar 100 puntos en Vitoria demuestra todo lo contrario. Frente al Laboral Kutxa, el cuadro barcelonista ha vuelto a mostrarse como un equipo blando, poco agresivo y falto de intensidad, aspectos fundamentales que han jugado en contra de sus aspiraciones de llevarse el triunfo.

Los azulgranas han concedido canastas fáciles, muchas faltas de tiro (27 tiros libres de los vitorianos), demasiadas pérdidas de balón, algunas muy inocentes (11) y demasiados rebotes en su zona (15), permitiendo al equipo de Ibon Navarro llevar el ritmo sin problemas desde el principio al fin, a excepción de unos minutos iniciales convertidos en un espejismo (12-17) dentro del balance global.

INCAPACES DE ARRANCAR FALTA

Esa falta de agresividad también se nota en ataque. Los azulgranas son incapaces de arrancar faltas. Sus puntos casi siempre llegan desde fuera. Pero en Vitoria los azulgranas solo han conseguido sumar seis triples (6 de 16) y eso los lastra, sobre todo si Huertas, que ejerce de director de juego, tiene un día espeso lo que complica aún más el decepcionante ataque en estático de los barcelonistas. 

La desorientación que vive Pleiss desde que llegó al Barça y el flojo perfil defensivo de Lampe y Doellman es un hándicap importante, porque deja muy solo a Tomic en la pelea dentro de la zona frente a los pívots rivales.

Y esa soledad se ha visto acrecentada con el buen trabajo defensivo de los vitorianos para anular a Deshaun Thomas y Abrines, los dos referentes ofensivos del equipo de Pascual en las últimas jornadas. Un tiro del estadounidense antes del descanso y dos del alero mallorquín son la mejor muestra de su desconexión.

Solo en el tramo final, con mucha más determinación, Abrines ha logrado irse hasta los 17 puntos aunque ya con el partido decidido. Satoransky (17 puntos) ha sido la otra alternativa ofensiva.

Pero los barcelonistas, al margen de Tomic, parecen lejos de ser un equipo fiable y sólido, especialmente cuando juegan fuera, y eso ha permitido al Laboral Kutxa controlar con cierta facilidad y no ver peligrar su triunfo en ningún momento, sosteniendo sus ventajas siempre en torno a la decena de puntos. 

Anotadores

Laboral Kutxa: James (17), Causeur (12), Bertans (19 ), Shengelia (7), Iverson (7) -cinco inicial- Adams (6), Tillie (6), Begic (8), San Emeterio (17), Hansbrough (4)

FC Barcelona: Huertas (4), Abrines (17), Thomas (11), Doelmman (10), Tomic (15) -cinco inicial- Hezonja (-), Satoransky (17), Pleiss (- ), Jackson (10), Lampe (8), Nachbar (2).