CLÁSICO EN MESTALLA

Algo más que una final

Un grupo de aficionados del Barça posan con una réplica de la Copa del Rey en Valencia

Un grupo de aficionados del Barça posan con una réplica de la Copa del Rey en Valencia / periodico

MARCOS LÓPEZ / Valencia

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Valencia se ha llenado este miércoles de camisetas del Barcelona. Y del Madrid. Miles de aficionados de ambos clubs se han paseado por la ciudad horas antes de disputarse la final de la Copa del Rey en Mestalla. Pero algo más que una final anda en juego. Para el Barcelona de Gerardo 'Tata' Martino sea, tal vez, la única posibilidad de conquistar un título esta temporada, tras la Supercopa de España del pasado verano arrebatada al Atlético. Para el Madrid de Carlo Ancelotti, en cambio, puede ser el prólogo de un mes lleno de éxitos en caso, claro, de eliminar al Bayern de Múnich en la semifinal de la Champions y de que los jugadores de Diego Simeone tropiecen en la Liga.

Martino llega con muchas dudas a la cita. Y sin defensas. Eso sí, con Bartra recuperado justo a tiempo de jugar, si no hay recaídas de última hora. Y con Mascherano, un central que no es central, en el eje de la zaga sosteniendo a un equipo en el que no se sabe si el técnico repetirá la fórmula de los cuatro volantes o apostará, al final, por un extremo (Alexis por Cesc). Piqué, aunque ha viajado con sus compañeros, ni siquiera se ha entrenado. De momento, el entrenador argentino guarda silencio sobre el once de la final. Ancelotti, sin Cristiano, tampoco las tiene todas consigo. El equipo blanco ha perdido a su arma más poderosa y ahora falta saber si el preparador italiano apuesta por Isco, un perfil más ofensivo, o en cambio sitúa a Illaramendi en el centro del campo.

El gesto de Mateu Lahoz

El valenciano Antonio Miguel Mateu Lahoz es el colegiado de la final. Este mediodía departía, con su hijo en brazos, con el presidente del Comité Nacional de Árbitros, Victoriano Sánchez Arminio, en el 'hall' del hotel Valencia Palace, al borde del cauce antiguo del Turia. Se le ha acercado un joven aficionado merengue, con camiseta azul, y le ha preguntado si podía hacerse una foto con él. Ha aceptado, pero con una condición: le ha hecho ponerse una sudadera encima de la zamarra del Madrid, el segundo uniforme del equipo blanco, para que nadie tenga una foto de Mateu Lahoz con un seguidor madridista.

Más o menos a la misma hora, el presidente del Barcelona, Josep Maria Bartomeu, y el del Madrid, Florentino Pérez, han acudido a la tradicional comida de las directivas que ha ofrecido la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en un hotel cerca de la playa y a la que han asistido un centenar de invitados, personas del mundo del fútbol y autoridades políticas principalmente: Ángel Villar, Vicente del Bosque, Javier Clemente, Alberto Fabra, Rita Barberá...

Bartomeu y Florentino han llegado por separado y han posado individualmente con el trofeo, pero tras degustar un menú compuesto por milhojas de atún, arroz del 'senyoret' y jalea de fruta de la pasión con bizcocho, han salido a la puerta del hotel y han posado juntos para los medios de comunicación. Se han dado la mano cordialmente y poco más, pues ambos han declinado hacer declaraciones o aventurar un resultado. Habrá que esperar hasta esta noche.