Rosell: «Pep no se queja nunca. Se juega cuando toca»

No solo siete puntos separan a Barça y Madrid. Esa distancia en lo fútbolístico (corta para algunos por el fútbol de unos y otros) se multiplica exponencialmente cuando de lo que se trata es de comparar la actitud de sus respectivos entrenadores. Mientras que José Mourinho apostó por destapar la caja de los truenos desde el primer momento, en un contexto en el que se siente como pez en el agua, Pep Guardiola persiste en su actitud comedida y respetuosa. «Pep no se queja nunca», respondió ayer Sandro Rosell cuando le preguntaron por las quejas del técnico blanco a cerca del calendario, los horarios y lo supuestamente perjudicial que es todo para su equipo.

«El equipo juega cuando toca», agregó el presidente azulgrana, que recurrió a la comparativa para rebatir los argumentos de Mourinho. «Me consta que los jugadores de rugby, los de baloncesto de la ACB, de la NBA, o los nuestros, el Barça, juegan martes y sábado, domingo y miércoles... Esto es deporte y cuando toca tienes que jugar», agregó Rosell durante la presentación del partido de rugby entre el USAP de Perpinyà y el Toulon en el estadio de Montjuïc el próximo 9 de abril. El dirigente ha considerado que los siete puntos de distancia que lleva el Barça a Madrid «no son suficientes» para aseverar que la Liga ya tiene dueño.

LA ESTRATEGIA / Dani Alves coincidió con el presidente. «Nunca salimos a quejarnos de nada. Tanto si empatamos como si perdemos, las excusas no sirven. Aquí solo vale el trabajo», afirmó el lateral brasileño, que consideró que las reiteradas excusas deMou no dejan de ser una estrategia. «Es muy listo y sabe utilizar sus armas. Se queja para desviar la atención y recibir todos los tiros, pero al final acabarán descubriéndolo. Nosotros tenemos nuestra filosofía y de aquí no salimos, los demás que hagan lo que quieran».

Alves también habló de su renovación (acaba contrato el 2012), que sigue encallada tras meses de negociaciones. «No me imagino un Alves sin el Barça», sentenció, dejando claro que su deseo es continuar en el Camp Nou. «Mi sueño es seguir en el Barça. Intento poner mi trabajo cada día para que este sueño se haga realidad. No es solo una cuestión de dinero, que es importante, también hay otras cosas», agregó sin especificar nada en concreto.

EL REGRESO DE XAVI / Lo que sí se siente Alves es valorado. «Me siento supervalorado por el cuerpo técnico y mis compañeros», y agregó que le gustaría que cerrar este tema lo antes posible, para bien o para mal. «Cansa un poco hablar siempre de lo mismo». El defensa consideró «irrelevante» la distancia de siete puntos que separa al líder del Madrid. «Queda mucho en juego», dijo, y valoró que el equipo se haya sobrepuesto a la supuesta crisis de febrero. «Ahora estamos mucho mejor». También lo está Xavi, que ayer volvió a entrenar y podrá jugar en Valencia.