El Mundial de baloncesto

Pau Gasol reclama los galones de 'jefe' en el debut de la selección

El pívot catalán se exhibe con 33 puntos y 8 rebotes en el rotundo triunfo ante Irán

Marc Gasol machaca el aro en una acción del encuentro disputado ayer ante Irán en Granada.

Marc Gasol machaca el aro en una acción del encuentro disputado ayer ante Irán en Granada.

LUIS MENDIOLA / Granada

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En su vuelta oficial a la selección después de dos años largos de ausencia (su último partido fue la final de los Juegos de Londres), Pau Gasol dio la impresión de querer recuperar cuanto antes el tiempo perdido. En cuanto saltó a la pista lo hizo decidido a recuperar los galones de jefe, y con sus 33 puntos, 8 rebotes y 3 tapones en 29 minutos  no dejó dudas de sus intenciones. Intenso y concentrado, Pau volvió a hacer de Pau (lo cual es decir mucho) y, bien escoltado por su hermano Marc (15 puntos, 10 rebotes), se adueñó del protagonismo en el debut de España en el Mundial, resuelto con una contundente victoria frente a Irán (90-60).

BUENOS DETALLES / Por el nivel del campeón asiático, que seguramente no prolongará su presencia en el torneo más allá de la fase de Granada, y también por la dificultad del grupo, con tres equipos como Francia, Serbia y Brasil candidatos firmes a los cruces, conviene no darle más valor del necesario al triunfo, pero sí que permite apreciar algunos detalles que acompañaron a la selección en su estreno mundialista. Sobre todo la ambición que transmitieron en determinadas acciones jugadores como Pau, Marc o Navarro, termómetros indispensables para conocer el estado de ánimo del vestuario. El equipo está con ganas. Muchas. Enchufado. Y a partir de esa buena actitud, todo se hará más fácil.

El partido frente a Irán puede tomarse como referencia relativa cara al grupo porque España estuvo privada de dos de sus cuatro pívots para no complicarse la vida. En esa planificación minuciosa, en la que cuidar cada detalle del campeonato se antoja fundamental, el cuerpo técnico de España decidió prescindir de Reyes e Ibaka debido a una contusión en la pierna el primero y a una sobrecarga en los isquiotibiales el segundo.

La decisión la tomaron poco antes del inicio del encuentro, después de la rueda de calentamiento por precaución y para evitar que ambas lesiones pudieran agravarse. Pero eso, lógicamente, obligó a rotar a Pau y Marc Gasol, las dos piezas titulares, con Claver, una solución provisional para darles descanso y debilitó la solvencia defensiva que busca la selección que, en algunos momentos, estuvo excesivamente permeable y realizó demasiadas concesiones.

DIVERTIR A LA GRADA / Aun así, Pau Gasol asumió el reto y se convirtió en la brújula de un equipo que intentó divertir a la grada del Palacio de los Deportes, y lo consiguió cuando logró correr, y también buscó las acciones espectaculares, un perfil lúdico que siempre ha acompañado a este equipo. Pau Gasol fue el jugador que generó muchas de las acciones, pero sobre todo el finalizador, el hombre al que buscaron todos sus compañeros para abrir la defensa de Irán.

Como termómetro regulador, para no perder su consistencia, la selección fue tensándose y relajándose en defensa, siempre en función del marcador. Los jugadores de Orenga apretaban los dientes cuando la selección iraní se acercaba (las diferencias no se abrieron más allá de los 15 puntos hasta después del descanso, 48-33) y bajó ligeramente los brazos cuando las cosas le iban de cara a nivel ofenisvo.

MARGEN DE MEJORA / Sin exprimir la maquinaria, dosificando las fuerzas con cuidado, buscando con paciencia el movimiento del balón y la fisura en la defensa rival, España acabó a partir del tercer cuarto por minar la resistencia de los iranís, en los que destacó el pívot Hamed Haddadi, lo que era previsible (excompañero de Marc Gasol en los Grizzlies como referencia) y, sobre todo, sorprendió el base Kamrani, un anotador efectivo, que acabó con 18 puntos.

«Hemos tenido buenos minutos, también minutos de mucho descontrol, en los que hemos pecado de poca disciplina defensiva, Pero eso nos da mucho margen de mejora», admitió el pívot barcelonés Marc Gasol como resumen.