Denuncian que Can Ruti maquilla el tiempo de espera del usuario

El Hospital Germans Trias i Pujol niega que existan manipulaciones en las listas de espera

Imagen de la mesa informativa de la campaña 'No marxis sense hora'.

Imagen de la mesa informativa de la campaña 'No marxis sense hora'. / periodico

QUERALT FLOTATS / Badalona

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Desde el pasado 9 de octubre, la Àgora Ciutadana de Badalona i la Plataforma Can Ruti Diu Prou llevan a cabo una campaña para emplazar a los usuarios del hospital Germans Trias i Pujol a no abandonar el centro sanitario sin tener una hora concertada para la próxima visita, prueba o intervención.

La iniciativa 'No marxis sense hora, hi tens tot el dret' pretende denunciar que actualmente la administración manipula el tiempo real de las listas de espera porque “no se empieza a contabilizar el tiempo hasta que no se llama al paciente para darle hora”.

El hospital Germans Trias i Pujol asegura que, en cuanto a las operaciones quirúrgicas, el tiempo de espera empieza en el momento en que el profesional decide que el paciente necesita una intervención, y no en el momento en el que se le llama por teléfono.

Una llamada que llega a realizarse hasta tres veces en horarios distintos, según marca las pautas del Servei Català de la Salut y se complementa con una carta vía postal. La coordinadora de la campaña, por el contrario, sostiene que si el paciente no responde a la llamada se le pasa al último de la lista.

REPRESIÓN POR LA CAMPAÑA 'NO MARXIS SENSE HORA'

Los profesionales que forman parte de esta iniciativa han denunciado, a través de un comunicado, que la dirección del hospital Germans Trias i Pujol ha intentado reprimir la campaña y al personal que participa en ella. La polémica se avivó a raíz de la entrevista publicada en El Periódico de una enfermera del centro. Según los organizadores, la trabajadora “ha sufrido presiones y problemas” debido a la repercusión en los medios.

La dirección de Germans Trias y el jefe clínico de Neurociencias enviaron un escrito a El Periódico corrigiendo algunas de las declaraciones de la profesional y afirman que esta es la única medida y acción que han tomado al respecto. Niegan rotundamente que se estén tomando medidas de represión sobre el personal sanitario que participa activamente en la campaña.

Los coordinadores aseguran que durante el primer fin de semana de campaña desaparecieron todas las pancartas del hospital y les denegaron el permiso para colocar una mesa informativa a la recepción, que finalmente se instaló en el exterior del centro.

Según la versión de Germans Trias y Pujol, se permitió a los organizadores colocar su punto de información y el acceso a los medios de comunicación para tomar imágenes. Sostienen que el hospital retira periódicamente la carcelería colgada en los espacios que no están habilitados para este fin.

UNA MESA INFORMATIVA PARA RECOGER QUEJAS

Los organizadores, a través de la mesa informativa que colocan cada miércoles en el interior del hospital, aseguran haber recogido quejas de pacientes a los que, después de cumplir el tiempo de espera, se les ha anulado la visita o la intervención ya sea por falta de personal o por falta de camas en la UCI.

El centro sanitario defiende que actualmente tiene más camas disponibles en la unidad de críticos que hace tres años y que la posibilidad puntual de anular una intervención porque las camas de críticos están ocupadas (por pacientes con estado de salud crítico o urgencias) ha existido siempre.

La Unidad de Atención al Usuario de Germans Trias, el canal que tienen los pacientes para remitir sus quejas y agradecimientos solo ha recibido a un usuario de la campaña de la Àgora y ‘Can Ruti diu prou’. Una paciente que, tras la explicación de los profesionales sobre el motivo de su cambio de hora decidió no presentar ninguna reclamación. 

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