LA FELICIDAD EN UNA PIZARRA / 22

Julio Manrique: «Hay que celebrar la vida, pese a todo»

Excelente director que borda la interpretación. Un buen actor que crece en la dirección. En esa dualidad se mueve Julio Manrique (Barcelona, 1973). Tras un verano de éxitos dentro del festival Grec, el director dará el salto al Romea y al Lliure. Mientras, el actor volverá a enfundarse la chupa de Toni en la serie 'Infidels', de TV-3.

«Hay que celebrar la vida, pese a todo»_MEDIA_1

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por Inés Álvarez

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1. ¿Existe la felicidad? ¿Podría explicar esa palabra a un niño de 8 años?

–Existen los buenos momentos. Y existe una manera feliz de mirar. La felicidad puede que tenga que ver con la curiosidad, con mantenerse abierto. De eso los niños –mi hijo, por ejemplo, que tiene 8 años– suelen saber más que nosotros.

2. ¿Cuándo llega lo crudo?

–Cuando te traicionas en algo verdaderamente importante. Todos nos mentimos a nosotros mismos de vez en cuando, por supuesto. Pero si la mentira es demasiado gorda, lo acabarás pagando con patatas.

3. «Yo para ser feliz quiero un camión», cantaba Loquillo. Usted para ser feliz, quiere...

–No perder nunca la ilusión, las ganas. Hay que celebrar la vida, pese a todo. Estar vivo está muy bien. Te acaban pasando muchas cosas.

4. ¿Solo felicidad?

–Un poco de desequilibrio, de desencuentro, de vez en cuando, puede ser muy aleccionador a la larga. Un empacho de satisfacción te puede idiotizar peligrosamente.

5. ¿Cuál ha sido el momento más intenso de su vida?

–Alguno de los que empezarían en forma de «la primera vez que...». Aunque la intensidad no lo es todo.

6. ¿Qué hace para desconectar?

–Jugar a fútbol con mi hijo suele sentarme la mar de bien. O inventar canciones para mi pequeña. Y un buen libro. Me gusta mucho colgarme en una librería, sin límite de tiempo, hojeando libros. Y una buena cena en pareja o con amigos. Soy muy glotón. Y otras cosas...

7. ¿Es de carcajada fácil?

–Sí, no me cuesta demasiado reír. Me río con lo imprevisto, cuando algo me pilla por sorpresa. Y me gusta el humor con algo de mala leche.

8. ¿Duerme bien o mal?

–Acostumbro a dormir bastante bien, aunque, por lo visto, me muevo mucho y a veces digo cosas.

9. ¿Y qué le quita el sueño?

–Soy bastante obsesivo con el trabajo. Eso hace que los procesos creativos sean muy vivos, muy intensos. Pero a veces me paso.

10. ¿Cómo le ven los demás: tal como es, mejor o peor de como es?

–Depende de quién te mira. Los que te ven más o menos como eres y te siguen soportando y hasta te quieren un poco, a esos hay que cuidarlos.

11. ¿Qué tal lleva las críticas: le afectan o es inmune al qué dirán?

–Me afectan. Prefiero los piropos. En ambos casos es importante mirar de dónde vienen y a qué responden.

12. ¿Cuál es su mayor virtud?

–Creo que sé escuchar. Y tengo una cierta capacidad para contagiar mi entusiasmo.

13. ¿Cómo sería para usted una noche perfecta de este verano?

–Pues con tomarme un vinito con mi mujer en un buen restaurante con vistas al mar tengo bastante.

14. ¿Cómo le saco de sus casillas?

–Intentando forzarme, sin motivo, a hacer algo que no quiero hacer.

15. ¿Qué le haría más feliz: tener más éxito y dinero o más tiempo?

–Un poco más de tiempo no me vendría mal, pero me gusta mucho mi trabajo y sería un cretino si me quejase de cómo me van las cosas.

16. Una vida infeliz sería una vida sin amor, música, amigos, sexo....

–Lo más importante en esa lista es el amor. Entendido en un sentido amplio: amor a los demás, al arte, al conocimiento... El amor es el motor de todo. Aunque a veces también lo sea la falta de amor. Hay a quien le tocan unas cartas muy cabronas.

17. ¿Algún libro de autoayuda?

–No. Suelen carecer del más mínimo sentido del humor.

18. ¿Qué pide a la lámpara mágica?

–Le he pedido un montón de cosas. Algunas me las ha concedido, otras, no. Para mí que es un timo. Pero, por si las moscas, seguiré frotando.

19. ¿Qué es lo que más le preocupa ahora mismo de su vida?

–El aire acondicionado. Si lo pones, te resfrías o te quedas afónico. Si no, te achicharras. Es un dilema.

20. ¿Cuál ha sido el peor y el mejor momento de este curso pasado?

–Ha habido muchos buenos... Y a los malos, que les den.

21. ¿En su oficio se respira felicidad?

–Como en todas: hay oxígeno de primera calidad y algún gasecillo tóxico. Yo amo y respeto mi oficio, y mis mejores amigos se dedican a él.

22. ¿Qué cambiaría de su vida, de su pasado, de su manera de ser?

–Me gustaría aprender a cocinar. Y saber más inglés. Y tocar la guitarra.

23. ¿Está en deuda con alguien?

–No me gusta esa expresión. Sí me siento agradecido a mucha gente.

24. ¿Un personaje público al que admire o querría parecerse?

–No soy muy mitómano, pero he tenido y tengo mis fascinaciones. Jacques Brel, Peter Handke, David Mamet, Al Pacino... Aunque en realidad no me gustaría parecerme a ellos.

25. ¿La fama aporta felicidad?

–Engorda el ego y poca cosa más. Aunque también puede ayudarte a abrir puertas a nivel profesional.

26. ¿En qué otro oficio sería feliz?

–No me hubiese importado jugar en la NBA. Pero me quedé pequeñajo. Qué se le va a hacer.

27. ¿Diría que el español medio es feliz o infeliz?

–Justo el otro día me encontré con el español medio y le dije: «Hombre, español medio, ¿qué es de tu vida?». Y me respondió: «Pues mira, ya ves, un día más así, otro más asá...».

28. Epicteto dijo: «La felicidad consiste en no desear nada».

–¡Típico de Epitecto!

29. Entre virtud o placer para toda la vida, ¿con qué se queda?

–Hay que perseguir y fomentar la bondad y la belleza. Y echar un buen polvo tan a menudo como se pueda.

30. ¿Qué sms le gustaría recibir?

–Uno bien escrito.

31. Si se vendiesen felizómetros y usted probara uno, ¿qué marcaría?

–¿Cómo sería? ¿Rollo control de alcoholemia o más sofisticado, tipo detector de mentiras, o un pequeño ordenador o un microchip que...? Por cierto, ¿cuál era la pregunta?