El autobús de acceso hasta Santa Fe atrae a un 15% de los visitantes del Montseny

La línea de autobús puesta en marcha durante los fines de semana de otoño para facilitar el acceso en transporte público hasta Santa Fe y otros enclaves turísticos del parque natural del Montseny ha reducido entre un 15% y un 20% el número de coches en la sinuosa carretera BV-5114 y ha eliminado los tradicionales colapsos que se producían en las horas punta, según muestran los resultados presentados por la Diputación de Barcelona. En total, unas 1.200 personas tomaron el autobús durante los siete días en que se puso en marcha la prueba piloto.

Joana Barber, directora de la Reserva de la Biosfera del Montseny, considera que el éxito de la prueba ha llevado a la Diputación a plantearse la creación de un "servicio regular" de autobús por el macizo, aunque todavía sin precisar con qué asiduidad. "Primavera del 2018 sería un buen momento para instaurar este servicio de forma definitiva", ha declarado el diputado adjunto de Espacios Naturales, Jesús Calderer.

Los trayectos

La prueba piloto consistió en habilitar dos líneas de autobús gratuito durante los fines de semana 21-22, 28-29 de octubre y 4-5 de noviembre, más el festivo de Todos los Santos, que cubrían los trayectos entre Sant Celoni y Campins (15 minutos) y entre Campins y Santa Fe (40 minutos). El primer fin de semana, no obstante, no se pudo poner en marcha en su totalidad debido a unos intensos chaparrones.

La prueba piloto de la Diputación de Barcelona tenía como objetivo no solo reducir el tráfico en la carretera BV-5114, que se colapsa de familias en tiempo de castañas y setas, sino evitar también el aparcamiento en los arcenes, un auténtico problema para los vecinos y en general para la seguridad vial. Además de los autobuses, que pasaban cada 30 minutos, en Campins se acondicionó un gran aparcamiento disuasorio con capacidad para 500 plazas.

Llegados en tren

Al tratarse de una prueba piloto, Barber ha explicado que fue necesario hacer sobre la marcha diversos retoques en los horarios y en la capacidad de los autobuses. Una de las sorpresas fue la gran cantidad de visitantes que realizaron la excursión totalmente en transporte público, es decir, llegaron a Sant Celoni en tren y allí tomaron el primer autobús. De hecho, el párking de Campins estuvo lejos de colapsarse. Este aluvión de turistas en la estación de Sant Celoni obligó a la Diputación a aumentar la capacidad de los autobuses que salían desde allí. "Vino más gente de la que habíamos pronosticado", ha afirmado Barber.

"Entre el 30% y el 40% de los usuarios del autobús llegó en tren", ha proseguido la directora de la reserva de la biosfera. "Hemos observado que hay mucha gente que renuncia totalmente al automóvil si dispone de un servicio público de calidad que le ofrece el mismo recorrido. Para futuras experiencias, eso sí, posiblemente será necesario un horario más madrugador para los visitantes que pretendían hacer rutas a pie por el macizo.

Calderer, finalmente, ha explicado que la Diputación estudiará si es necesario instaurar un transporte público similar en otros parques de su jurisdicción que también sufren una gran afluencia de gente durante los fines de semana, como el Coll d'Estanelles de Sant Llorenç del Munt, pero ha aclarado que es un idea aún muy preliminar.