CONTRA LAS AGRESIONES SEXISTAS

Por la noche, como por el día, no es no

Un grupo de chicas pasa por delante del estand antimachista.

Un grupo de chicas pasa por delante del estand antimachista. / periodico

Luis Benavides / Barcelona

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Ocurre, demasiado a menudo, que la noche confunde a muchos hombres, jóvenes y no tan jóvenes. Y es que entienden (o les han hecho pensar) que todas las mujeres que salen para hacer una copa están a su alcance y que si van arregladas o bailan como si no hubiera un mañana es porque  quieren ligar. Así, los hombres traspasan líneas como piropear e invadir el espacio de ellas, comportamientos que quizá nunca harían a plena luz del día, en el metro de camino a la oficina, en el mercado o en un restaurante.

Cuando cae la noche no todo vale, un ‘no’ sigue siendo un ‘no’. «En ambientes de ocio nocturno se toleran cosas impensables de día: agresiones sexistas. Esta intervención en esta zona de discotecas para concienciar, a unos y otros. El objetivo último es construir una sociedad más igualitaria», explica Joan Lluís Ferrer, miembro del equipo del estand antimachista situado en el Front Marítim desde el pasado jueves 29 de junio.

El puesto de asesoramiento y denuncia de acosos sexuales  está situado en el paseo Marítim, a la altura de la calle Trelawny, entre el Hospital del Mar y la zona de discotecas del puerto. El estand abre todos los jueves, viernes y sábados a las 12 de la noche; y hasta las seis de la mañana. «Aquí explicamos qué es la violencia sexista a todas las personas interesadas en el tema», explica Ferrer. «En caso de ser informados de una agresión sexual, explicamos cómo la pueden denunciar. Si fuera necesario, llamamos a los Mossos y pedimos asistencia sanitaria», añade el psicólogo, quien cada noche recopila información muy valiosa para hacer seguimiento y evaluar este servicio municipal como la edad y procedencia de las personas que se acercan a la caseta, el tipo de consultas recibidas y el tipo de agresiones denunciadas,  entre otros datos totalmente anónimos. 

VISIBILIZACIÓN

En el estand, de color lila y con el lema ‘no es no’ en varios idiomas, turistas  y locales encuentran jóvenes muy preparados.

«En mi caso, por ejemplo, soy integradora y educadora social; y todos hemos recibido una formación específica para comenzar a trabajar en este punto de asesoramiento», explica Raquel Santana, quien subraya la importancia de visibilizar la problemática y darse a conocer. Santan explica que «hoy quizá pasan, nos ven y no se paran» porque no tienen ninguna duda o no necesitan su ayuda. Pero lo interesante es que «saben que estamos aquí», por si  son protagonistas o han presenciado una agresión sexual.

Esta acción del Ayuntamiento ha sido muy bien recibida por la ciudadanía, que incluso pide más estands, en tras zonas de ocio nocturno de la ciudad. «Es un problema real, y estamos hartos de leer que se producen agresiones durante los sanfermines, que violan a chicas en un festival de música de Suecia... Por eso me parece muy bien que las personas que nos gobiernan tomen medidas», explica Sara Díez, de 29 años, quien se ha acercado a la caseta movida por la curiosidad. «Que lleve escote no te da derecho a nada, lo tengo muy claro», añade Díez, quien reconoce que algunas mujeres llevan peor el enfrentamiento y  lo pasan realmente mal en ciertas situaciones.  

PAREJA ITINERANTE

Dos de las cuatro personas responsables de la caseta antimachista, coordinados con los agentes de seguridad de la zona, salen cada noche con los chalecos llenos de chapas y  pequeños folletos con la ubicación del estand y dos teléfonos básicos: el 112 para emergencias y el 900 900 120 contra la violencia machista, totalmente confidencial y gratuito. 

«Si lo ves, no calles, actúa». Esta es una de las máximas, el lema principal, del folleto. Y eso mismo hizo Marina Luque, de 20 años, el finde semana anterior. «Estaba con una amiga por esta zona de discotecas y vimos dos chicos jóvenes que no paraban de acosar a chicas extranjeras, a las que veíamos muy incómodas. Les dijimos que parasen de agobiar, que eso no mola  y no conseguirán nada así», recuerda Luque al personal del estand, al que acudió para explicar lo sucedido.

Esta intervención en la zona de discotecas del Front Marítima tiene varios antecedentes. Durante las fiestas de la Mercè del 2016, y en el marco de la campaña ‘La Mercè Antimasclista’ para prevenir la violencia machista especialmente en las fiestas mayores de los barrios, se puso en funcionamiento un punto informativo con la misión de sensibilizar a la ciudadanía. También durante las fiestas de Santa Eulàlia, concretamente en la zona de ocio nocturno La Lali Jove, se instaló una carpa para sensibilizar sobre esta problemática y atender posibles casos de agresiones.

Páginas de información de la ciudad realizadas con la colaboración del Ayuntamiento de Barcelona.