El reportero Angelo Attanasio y el fotógrafo Marco Ansaloni analizan la realidad de los habitantes de Nicosia (Chipre), Mitrovica (Kosovo), Belfast (Irlanda del Norte) y Mostar (Bosnia-Herzegovina).
Cada semana publicarán un reportaje sobre una de estas cuatro ciudades, que han sufrido violentos conflictos que han dividido a la sociedad. Mostar es la última entrega
Chipre no logra cerrar las heridas. Pero después de casi cincuenta años de conflicto, grecochipriotas y turcochipriotas intentan construir un futuro juntos a partir del dolor común.
En esta ciudad el conflicto de Kosovo aún no ha acabado. Los más afectados son los jóvenes, la 'generación del puente' criada al margen del Ibar, el río que separa serbios y albaneses.
La capital de Irlanda del Norte conserva los muros que separan a los protestantes y católicos en los barrios conflictivos. A pesar de que los acuerdos del Viernes Santo han acabado con la violencia y han unido a excombatientes de ambos lados
En 1993 la artillería croata derruía el puente de Mostar, símbolo de convivencia interétnica de la ex-Yugoslavia. Veinte años después adolescentes croatas y musulmanes intentan construir un futuro común a través de la música.