ocho meses en el elíseo

La libertad de Brigitte Macron

Brigitte Macron

Brigitte Macron / periodico

Eva Cantón

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Con la misma naturalidad con la que ha roto un tabú, demostrando que una mujer tiene el mismo derecho que un hombre a elegir una pareja más joven, Brigitte Macron va dándole forma y contenido al rol de primera dama que ocupa desde hace ocho meses.

Sin estatus oficial pero con una ‘carta de transparencia’ creada tras la elección del presidente de la República, Brigitte Macron se ha hecho un hueco en el Elíseo y fuera de él.

Además de acompañar al presidente en sus viajes oficiales y ejercer de madrina en actos sociales o educativos, la esposa del presidente sigue los pasos de Claude Pompidou para que el arte tenga cabida en el número 55 del Faubourg Saint-Honoré. Este mes de enero recibirá a los directores de los grandes museos franceses. Objetivo: "Hacer del Elíseo un pequeño Louvre Abu Dabi”, según cuenta un colaborador. 

"¿Qué? ¿Nos vamos?"

Pero Brigitte Macron dibuja el perímetro de su función con los pies en la tierra y cada tarde sigue un ritual. “Asoma la cabeza en el despacho de sus dos colaboradores, Pierre-Olivier Costa y Tristan Bromet, y dice: '¿Qué? ¿Nos vamos?”.

Los tres salen a dar una vuelta por las calles de París, acompañados a veces por Némo, el labrador de la pareja presidencial. “Brigitte tiene una necesidad vital de no quedarse encerrada en el palacio, quiere seguir en contacto con la realidad”, contaba hace una semana al diario ‘Le Monde’ su director de gabinete.

Entre paseo y paseo, la esposa del presidente responde a las numerosas cartas que llegan a su despacho –entre 100 y 150 al día-, supervisa las actividades y recepciones oficiales en el Elíseo y dedica parte de su tiempo a asuntos relacionados con la salud, la discapacidad y la igualdad de género. “La mujer de hoy no tiene que estar detrás de su marido”, ha dicho en alguna ocasión, una convicción que comparte con su esposo.

Infancia y juventud

Pero detrás de su imagen pública, hay una parte menos conocida sobre la que intenta arrojar luz la biografía no autorizada ‘Brigitte Macron, la liberada’, que este miércoles sale a la venta en Francia, editada por L’Archipel.

Su autora es Maëlle Brun, colaboradora de ‘Closer’, la revista del corazón que destapó la infidelidad de François Hollande al publicar una fotografía del expresidente francés en moto y con casco saliendo del apartamento de Julie Gayet.

A través de unos 50 testimonios, la periodista repasa la infancia y juventud de la esposa del presidente, nacida en Amiens el 13 de abril de 1953. La benjamina de seis hermanos es descrita como una niña alegre que gozaba de una gran libertad. Esa niña fue una adolescente dinámica, popular y con facilidad para crear pandillas. Una faceta que todavía mantiene, igual que la fascinación por los artistas. El pasado 25 de octubre escuchó a Mick Jagger, en pleno concierto de los Rolling Stones, decir “hay muchas estrellas esta noche. Patrick Bruel, Sylvie Vartan y Brigitte Macron”.