FOTO POLÉMICA

Consternación por la foto de una niña guaraní que bebe de un charco en Argentina

La revista 'Misiones Online" ha hecho viral la imagen de la pequeña, perteneciente a la comunidad mbyá en la ciudad de Posadas, que ha levantado gran polémica

niño guaraní bebe de un charco de la calle

niño guaraní bebe de un charco de la calle / periodico

ABEL GILBERT / BUENOS AIRES

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Patricia Fernández, periodista de Misiones Online', se desplazaba por la avenida Mitre de la ciudad de Posadas, unos 1000 kilómetros al noreste de la capital argentina, bajo un sol voraz. Los casi 40 grados de temperatura se sentían en el cuerpo como un golpe de fuego. Iba camino a su casa, huyendo de un aire que entumece los sentidos, cuando la detuvo un semáforo. De repente vio algo que la estremeció: una niña se había agachado para beber agua de un charco formado en la plaza del microcentro. Agua de días. De una lluvia pasada o quizá podrida. Y no era cualquier niña. Ella pertenece a la comunidad originaria mbyá o mbyá guaraní, que habita en Paraguay, el sur de Brasil y la provincia de Misiones, y es una de las más golpeadas entre los 13,5 millones de pobres que existen en Argentina.

La escena no podía ser más elocuente y a la vez perturbadora. Algo –el instinto profesional, la indignación- le dijo a Fernández que tenía que registrarla. Solo tenía a mano su teléfono. La imagen captada fue objeto de debate dentro de la redacción. Y no se publicó -"para mostrar esta realidad que existe hace varios años", según Misiones-  hasta que la niña con sed recibió asistencia (bidones de agua, helado). Misiones Online . Fernández nunca midió el impacto mediático y global que podría tener de esa fotografía. Fue resultado de una acción casi refleja. "Algo había que hacer", dice.

Cuenta Fernández que la presencia de niñas y niños mbyá es frecuente en Posadas, ya se han convertido en un paisaje natural de la capital misionera, incluso en zonas cercanas a la sede de Gobierno. No viven allí sino en aldeas ubicadas a unos 200 kilómetros. Vienen a la ciudad con sus padres o un mayor a vender limones y artesanías o a pedir dinero en su nombre. Los obligan a mendigar. Lo que nunca había visto era una situación como la que tuvo delante de sus ojos la tarde más agobiante de diciembre. "Fue muy difícil tomar la foto".

Misiones, al igual que Formosa y Corrientes, se encuentran entre las provincias de mayor desigualdad social. Se calcula que la pobreza golpea a más del 40% de sus habitantes. Los mbyá conocen muy bien un flagelo que se agudiza por una mezcla de cuestiones que exceden la economía. En cierta medida dependen de tarjetas alimentarias que les provee el estado. La niña deshidratada que buscó el agua de un charco para calmarse podía ser cualquiera de la población en riesgo de esa comunidad.

Según especialistas, los menores mbyá guaraní padecen un atraso de crecimiento conocido como stunted growth, por lo cual, es más elevada la tasa de mortalidad que otros niños argentinos en la franja de la pobreza. “Ojala que chicas como las del otro día nunca más tuvieran que buscar agua en el suelo de una plaza”, dice Fernández. La única certeza que tiene es que el calor de Posadas le agrega una capa de infierno al infierno social.