EL DRAMA DE LA INMIGRACIÓN

Las barbaridades de Europa con los refugiados

La hostilidad hacia los migrantes, promovida desde instancias oficiales, ha derivado en maltrato, discriminación, abusos y violencia en muchos países de la UE

Familias de refugiados tras cruzar la frontera de Macedonia.

Familias de refugiados tras cruzar la frontera de Macedonia. / periodico

MARTÍ BENACH / BARCELONA

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Lejos de cumplir con los objetivos declarados de solidaridad acogida, la Unión Europea ha optado por reforzar los controles fronterizos, restringir el derecho de asilo y endurecer el trato a los inmigrantes. En ocasiones, la hostilidad hacia los refugiados, promovida desde instancias oficiales, ha derivado incluso en maltrato, discriminación, agresiones y otras barbaridades.

ALEMANIA

Como en Dinamarca, en el corazón de Europa también confiscan bienes a los refugiados. En Baviera, el ‘land’ más rico y el más crítico con la política de acogida de la cancillera Merkel, la policía puede requisar dinero y activos si superan los 750 euros, según aseguró al diario ‘Bild’ el ministro estatal de Interior, el conservador Joachim Herrmann. En el vecino y también sureño Baden-Württemberg, el límite de dinero que se permite quedarse a los refugiados se ha reducido a solo 350 euros.

REPÚBLICA CHECA

La ONU ha denunciado las “sistemáticas” violaciones de los derechos humanos y el trato “degradante” que sufren los inmigrantes y refugiados. Entre otras restrictivas medidas, el país aprobó una ley que permite que sean detenidos entre 40 y 90 días, según los casos, y se les obliga a pagar una tasa diaria de 10 dólares por su estancia involuntaria en los centros de internamiento, a menudo en condiciones penosas. Especialmente en el de Bílà-Jezová, a 80 kilómetros al norte de Praga, que el propio ministro de Justicia checo, Robert Pelikán, describió como “peores que en una prisión”.

ESLOVAQUIA

Eslovaquia, contrario como otros países del Este a las cuotas obligatorias, se comprometió el año pasado a acoger a 200 refugiados sirios, siempre y cuando fueran cristianos. El Gobierno alegó criterios de integración y cohesión social para negarse a aceptar musulmanes. “Tenemos una comunidad musulmana muy pequeña, ni siquiera tenemos mezquitas”, justificó un portavoz del Ministerio del Interior. El primer ministro eslovaco, Robert Fico, ha urgido este martes a la UE a detener la afluencia de refugiados y comparó la política inmigratoria europea con un “suicidio ritual”.

BULGARIA

Las autoridades búlgaras devuelven a Turquía “de forma sumaria” a inmigrantes y solicitantes de asilo, con frecuencia “tras robar sus posesiones y tratarles de forma violenta”, según denunció Human Rights Watch (HRW) la semana pasada. Esta oenegé documentó el año pasado 59 incidentes de retornos policiales forzosos, en los que se produjeron robos, agresiones y mordeduras de perro. Los abusos denunciados fueron notificados el 15 de diciembre al Ministerio del Interior búlgaro, que aún no ha respondido a la investigación de HRW.

REINO UNIDO

En Inglaterra Gales, los demandantes de asilo se han visto sorprendidos por dos medidas estigmatizadoras que algunos han considerado propias del apartheid. En Cardiff se obligó a los refugiados a llevar pulseras rojas para identificar a los que tienen derecho a recibir una comida diaria gratis. En Middlesbrough (norte de Inglaterra), las puertas de la mayoría de casas asignadas a refugiados se marcaron también con el color rojo. Un grupo de ellos denunció que el estigma les haría víctimas de numerosos abusos y acosos. La controversia obligó a las autoridades a retirar ambas medidas.

FINLANDIA

La xenofobia se extiende también por los países nórdicos. Un grupo de jóvenes creó en la localidad de Kem, fronteriza con Suecia, los denominados Soldados de Odín, patrullas ciudadanas que vigilan las calles para supuestamente proteger a los nativos finlandeses de los inmigrantes. Los integrantes del grupo, que visten chaquetas negras adornadas con un símbolo vikingo y la bandera finlandesa, preocupan cada vez más a las autoridades, alarmadas por su expansión a otras ciudades del país.

NORUEGA

Las deportaciones a Rusia de refugiados llegados a Noruega por el Ártico, donde las temperaturas alcanzan estos días los -30º, han generado controversia y críticas de organismos internacionales. La semana pasada, la expulsión de 13 refugiados hizo que muchos otros huyeran atemorizados de un centro de acogida. En la lista de expulsiones pendientes figuran familias enteras sirias y afganas con niños y bebés. La nueva normativa, aprobada por el Gobierno conservador con el apoyo del opositor Partido Laborista, empezó a aplicarse a finales de otoño pese a las críticas del ACNUR.