Obama advierte de que la violación de la soberanía de Ucrania sería "desestabilizadora"

Obama durante la rueda de prensa. AFP

Obama durante la rueda de prensa. AFP / periodico

RICARDO MIR DE FRANCIA / Washington

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El presidente estadounidense, Barack Obama, ha afirmado este viernes en rueda de prensa que está "profundamente preocupado" por los movimientos de fuerzas en Crimea (Ucrania) y ha advertido a Rusia que cualquier violación de la soberanía de ese país será "profundamente desestabilizadora".

Obama ha lanzado este viernes una clara advertencia a Rusia para que no intervenga militarmente en Ucrania. "Estados Unidos estará al lado de la comunidad internacional para afirmar que una intervención militar de Rusia en Ucrania tendrá costes", ha dicho en una breve comparecencia desde la Casa Blanca. Obama se ha mostrado "profundamente preocupado" por las informaciones que llegan desde Simferopol, la capital de la región ucraniana de Crimea, donde cientos de militares con rifles automáticos han tomado un aeropuerto civil y uno militar.

Invasión armada

El Gobierno ucraniano ha acusado a Rusia de estar detrás de la toma de las instalaciones y el Parlamento en Kiev ha solicitado al Consejo de Seguridad de la ONU que se reúna de forma urgente para dar una respuesta a la crisis. "A lo que está sucediendo se le puede llamar invasión armada y ocupación, una violación de los tratados y las normas internacionales. Esta es una provocación directa para que se produzca conflicto sangriento en un Estado soberano", aseguró el ministro del Interior ucraniano, Arsen Avakov.

Guerra fría

La intervención de Obama, que no estaba planeada, se ha precipitado a medida que se disparaba la tensión en Crimea. "Cualquier violación de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania sería profundamente desestabilizadora, algo que no le interesa ni a Rusia ni a Ucrania ni a la Unión Europea", ha dicho el presidente en una alocución que ha durado menos de cuatro minutos. Como viene siendo la norma desde la defenestración del presidente proruso, Vicktor Yanukovich, la Casa Blanca está mostrándose bastante comedida en sus declaraciones. No quiere una confrontación directa con Rusia y en varias ocasiones ha repetido que no concibe la pugna que se vive en Ucrania como una reedición de las "partidas de ajedrez de la guerra fría". Pero al mismo tiempo que ha estado haciendo llamamientos a la calma y ha intensificado los contactos diplomáticos con el Kremlin, también ha dejado claro su apoyo al nuevo Gobierno ucraniano surgido de la revuelta que acabó con Yanukovich. "Una intervención sería una grave equivocación", dijo por la mañana el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.

Misión de mediación

La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Samantha Power, solicitó también este viernes el envío urgente de una misión internacional de mediación para tratar de calmar la crisis desatada en la península ucraniana de Crimea y llamó a Rusia a dar marcha atrás al aumento de su presencia en la zona.

Power aseguró que su Gobierno está "muy preocupado" por las informaciones de movimientos de fuerzas militares rusas en territorio ucraniano y condenó "cualquier movimiento" que busque "minar la integridad territorial" del país.

Mientras, el embajador británico precisó que la misión internacional en consideración podría estar formada por el enviado del secretario general, Robert Serry, ya presente en Ucrania, y miembros de la OSCE.

Mientras, Ucrania ha puesto en marcha todos los instrumentos diplomáticos para defender su territorio. Ucrania Ha pedido el apoyo del Consejo de Seguridad de la ONU para defender su integridad territorial, al tiempo que ha advertido de que el país tiene capacidad para defenderse de las agresiones.

Así lo explicó a los periodistas el embajador ucraniano ante las Naciones Unidas, Yuriy Sergeyev, tras informar a puerta cerrada de la situación del país al Consejo de Seguridad, que a continuación inició un debate entre sus miembros. Sergeyev, según indicó, solicitó al máximo órgano de decisión de la ONU "medidas para detener los peligrosos acontecimientos que están poniendo en peligro la paz internacional" y la "integridad territorial" de Ucrania. El embajador ucraniano confió en que el Consejo de Seguridad muestre apoyo moral y político a Kiev y "haga todo lo posible a través de la diplomacia preventiva".

Los movimientos rusos

"Todavía podemos detener el separatismo", señaló Sergeyev, que acusó a Rusia de alimentar el enfrentamiento en Crimea. Además, el embajador denunció el "cruce ilegal de fronteras" por parte de distintas unidades militares rusas, entre ellas varios aviones y once helicópteros de combate, y otros movimientos del Ejército ruso.

También señaló que los aeropuertos de Simferópol y Sebastopol han sido bloqueados por fuerzas rusas y aseguró que el desarrollo de los acontecimientos es similar al ocurrido en las regiones georgianas de Abjasia y Osetia del Sur, reconocidas como independientes por Moscú. En este sentido, solicitó la salida de todas las fuerzas rusas que se encuentran "ilegalmente" en el país para poder discutir fórmulas con las que "calmar a la gente" en Crimea.

Sergeyev recordó que las potencias del Consejo de Seguridad se comprometieron en el pasada a respaldar la unidad territorial de Ucrania y aseguró que Kiev no va a buscar la "confrontación". "No quiero ni pensar en acciones militares", señaló el embajador, que en todo caso se mostró convencido de que su país "es lo suficientemente fuerte como para defenderse". 

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