Al menos 29 personas resultan heridas en el fulminante desalojo de la plaza Taksim

Partidarios del AKP siguen el discurso de Erdogan, en Ankara.

Partidarios del AKP siguen el discurso de Erdogan, en Ankara. / AO

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La policía turca ha desalojado este sábado por sorpresa y de forma fulminante la céntrica plaza Taksim en Estambul y el adyacente parque Gezi con cargas y el empleo de abundante material antidisturbios, como cañones de agua y gases lacrimógenos. El desalojo se produce pocas horas después de que el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, adviertiera de que la policía desalojaría el domingo por la fuerza a quienes siguieran ocupando el parque Gezi de Estambul, centro de las protestas antigubernamentales que sacuden Turquía desde hace dos semanas.

Sobre las 20.00 horas, los agentes antidisturbios han empezado la invasión del parque, centro y símbolo de las protestas. El uso masivo de gas pimienta ha sido de nuevo la estrategia utilizada por los agentes para tratar con los manifestantes, que han ido retrocediendo pacíficamente, pero sin disolverse. Según las autoridades, 29 personas han sido hospitalizadas a causa de heridas sufridas en el operativo policial, aunque en las redes sociales los activistas turcos hablan de muchos más, tratados por médicos voluntarios alrededor de la plaza y del parque.

La presencia de numerosos reporteros no ha afectado a la contundencia con que la policía ha realizado el desalojo. Un gran número de antidisturbios han irrumpido en la zona verde desde la plaza Taksim, mientras que los manifestantes han salido a la carrera por el lado opuesto del parque entre escenas de pánico.

Tras salir del parque, muchos manifestantes se refugiaron en calles adyacentes o en hoteles cercanos. En el Hotel Intercontinental, la policía formó ante la puerta y exigió a la dirección que expulsara a quien no fuera huésped. En otro hotel, el Divan, Ramiz Topal, un diputado del principal partido de la oposición, el CHP, fue golpeado por los agentes, según declaró la propia víctima. "La policía está atacando a su propio pueblo. No le veo un fin a esto", denuncio el parlamentario.

Barricadas y resistencia

Frente a la Universidad Técnica, jóvenes y adolescentes han formado una cadena humana, han erigido barricadas y se han conjurado para resistir a los agentes."Taksim en todas partes. En todas partes resistencia", han coreado los manifestantes, el lema de guerra de la revuelta ciudadana. Allí, como en la calle Istiklal, una importante arteria comercial, como en otras muchas vías del centro, los agentes han ido avanzando lanzando gas, obligando a transeúntes y turistas a refugiarse en cafeterías y hoteles.

Tres horas después de que el primer bote de humo fuera disparado, los agentes aún presionaban a grupos de jóvenes, casi calle por calle, que retrocedían ante los gases, sin dispersarse, y respondían con algún ocasional lanzamiento de botellas o tratando de lanzar de vuelta los botes de humos.

Alrededor del parque y de la plaza Taksim, un cordón policial impedía entrar a nadie en la zona verde, donde empleados municipales se afanaban en desmantelar el campamento donde miles de personas se han concentrado durante dos semanas para evitar que fuera destruido.

Las palabras de Erdogan

Estas escenas se producen solo unas horas después de que Erdogan dijera: "Lo digo abiertamente. Si mañana (por este domingo) no está vacío (el parque), las fuerzas de seguridad lo vaciarán. Este Estado no es vuestro juguete", ha anunciado Erdogan en un multitudinario mitin de su partido, el islamista moderado AKP, en Ankara. El primer ministro ha emplazado a los ocupantes de la zona verde a marcharse y ha asegurado que la plaza pertenece a "todos los habitantes de Estambul y no a organizaciones ilegales".

Erdogan ha reiterado su promesa de que no emprenderá la reurbanización que implica la destrucción del parque hasta que los jueces determinen si el proyecto es legal y que, en cualquier caso, organizará una consulta popular. "Si la gente dice que quiere el parque, lo dejaremos. Si la gente quiere el museo municipal, lo construiremos. Haremos lo que quiera el pueblo", ha asegurado en referencia a uno de los posibles usos previstos para el edificio que sustituiría esa zona verde.

Arropado por decenas de miles de sus partidarios, Erdogan ha insistido desde un gran escenario y arropado por los miembros de su Gobierno que los manifestantes son extremistas que utilizan ese parque como excusa para atacarle."Respeto a los ecologistas. Pero esos no eran ecologistas. Detrás del telón del parque Gezi hay organizaciones ilegales", ha reiterado antes de asegurar que la mayoría de los que reivindican ese espacio verde "nunca han estado allí".