antiquemaduras casero

Cinco formas de fabricar tu propio 'aftersun' en casa

Una mujer se aplica 'aftersun' en el baño.

Una mujer se aplica 'aftersun' en el baño. / periodico

Gabriel Ubieto / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

A pesar de que los meteorólogos dan por superada la enésima ola de calor de este verano, la canícula no afloja y las altas temperaturas van parejas a los intensos (y peligrosos) rayos del sol. El 'aftersun' suele ser el bálsamo ideal para combatir la deshidratación de la piel y la radiación provocada por los implacables rayos solares, que nos puede salvar de arrastrar una epidermis seca o, peor aún, churruscada.

Pero no siempre se tiene a mano crema para después del sol cuando se necesita, o bien se prefiere ser más naturista y no fiarse de los productos químicos con los que se elaboran los 'aftersun' recientes. Para aquellos que no dispongan de cremas químicas o prefieran retrotraerse a épocas en la que no había multinacionales farmacéuticas, existen remedios naturales que se pueden elaborar con ingredientes de uso cotidiano.

1. El 'clásico': aloe vera

El cuidado que se le tiene que dar a una planta de aloe vera no llega a la poca exigencia de cuidados que requieren los cactus, pero casi. Y sus beneficios para una piel castigada por el sol son muchos. El aloe vera constriñe los vasos sanguíneos y ayuda a una rápida rehidratación, además de sanar quemaduras y ser un portento de vitaminas. Su modo de uso es sencillo: se corta una hoja por la mitad, se extrae la gelatina de su interior, se deja reposar media hora en la nevera y luego se hierve hasta que expulse burbujas de un tono marronoso. Se deja enfriar y ya está lista para usarse.

2. El 'vintage': avena

La avena es un ingrediente que, si bien hasta hace poco estaba mucho más presente en la dieta, actualmente parece que ha perdido algo de protagonismo. No así sus múltiples propiedades: un baño de avena durante 15-30 minutos tiene altas capacidades rehidratantes, reequilibra el PH de la piel y contribuye a reducir la inflamación provocada por las quemaduras. Si a la planta se le echa aceite de lavanda, el resultado mejora considerablemente.

3. El 'gintónic': pepino

Aunque no lo parezca, el pepino sirve para algo más que para complementar el popular combinado. Rico en vitamina C, ácido ascórbico y ácido cafeico -que evitan la retención de agua-, son una excelente arma contra la inflamación o la piel irritada. Además de ser un buen rehidratante por su alto contenido en agua, lo que también explica su refrescante papel en las ensaladas.

4. El 'ensalada': vinagre de manzana

Además de ser un sabroso aliño para las frescas hortalizas estivales, el vinagre de manzana es un excelente exfoliante, que desbloquea los poros, aumenta la circulación y permite que la piel respire, eliminando grasas. Solo hay que mezclar media cucharada de vinagre en un vaso de agua, humedecer un algodón en el líquido y aplicarlo sobre la zona afectada. Como el yogur, también sirve para eliminar el acné. Su principal inconveniente: su olor es desagradable, por lo que se recomienda usarlo por la noche.

5. El 'té de las cinco': té verde o de menta

Tan sencillo como aprovechar una bolsita de té después de haberla usado para hacer una infusión y aplicarla sobre la zona quemada o reseca. Las propiedades antioxidantes de la teína son muchas, y muy beneficiosas. Se puede utilizar directamente la bolsa caliente -que no hirviendo- o abriéndola y mezclando los posos con alguna de las lociones anteriores. También es buena para combatir el envejecimiento prematuro de la piel.

Más mitos que remedio

Hay otros métodos caseros que no tienen tanto recorrido científico o de los que se han exagerado sus bondades. Un claro ejemplo es el de la bella reina Cleopatra y sus baños de leche de burra. Si bien la leche contiene ácido láctico, que es un elemento relacionado con aplicaciones exfoliantes, cosméticas y regenerativas, "la potencia y capacidad de absorición de la piel no suele ser suficiente como para combatir quemaduras solares", comenta el dermátologo Rubén Del Río. Si bien no es dañino, como si podría serlo el aplicar ácido cítrico de un limón, tampoco se podría considerar beneficioso. En la misma lógica actúan las lociones de yogurt u otros lácteos. 

Como siempre, la prevención es la mejor arma

Aunque el mejor 'aftersun' es, sin duda, el que no tiene que llegar a aplicarse. Por ello doctores como Rubén Del Río alertan de la importancia de evitar las horas de máximas exposición al sol, es decir, entre las 12 y las cuatro de la tarde, hidratarse constantemente y no llevar ropa muy ceñida, ya que las quemaduras se acentúan en las zonas aledañas por la dificultosa circulación sanguinea. Además, conviene altertar de que "una quemadura tiene más de lesión que de enfermedad, así que nada de antibióticos sin receta previa", explica el doctor Del Río.