No quiero renunciar a mis identidades

La independencia es una cuestión más sentimental que racional, pero las identidades dependen también del contexto. Y así, yo, cuando salgo de la ciudad de Barcelona hacia otros lugares de Catalunya y me preguntan de dónde soy, digo que de Barcelona. Pero cuando salgo de Catalunya y voy a otros lugares de España, digo que soy catalán. Y cuando voy a algún pais de Europa y me preguntan de dónde soy, digo que español. Y si estoy de viaje en Indonesia, por ejemplo, tiendo a sentirme vagamente europeo o "occidental", aunque también me siento español, catalán y barcelonés. Así que votaría independencia 'no' porque no quiero renunciar a ninguna de mis identidades.