Contenido de usuario Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.

Nivel B-2 de inglés, una normativa injusta

Estudiantes de Química de la Universitat de Barcelona en la biblioteca de su facultad.

Estudiantes de Química de la Universitat de Barcelona en la biblioteca de su facultad. / ALBERT BERTRAN

En relación con la noticia publicada hace unos días sobre la decisión de la Generalitat de Catalunya de aplicar una moratoria de cuatro años a la normativa de acreditación del nivel B-2 para otorgar el título de Grado a los estudiantes universitarios, me pregunto cómo puede ser legal que se condicione la concesión de dicho título a quienes, después de haber cursado el grado correspondiente, después de haber abonado cada curso el importe de la matrícula (bastante elevado, por cierto) y después de aprobar todas las asignaturas, a la acreditación de dicho nivel de conocimientos del inglés. ¿Cómo puede ser legal en este país en el que el correcto aprendizaje de idiomas ha sido sido siempre una asignatura pendiente; donde los maestros y profesores no han contado nunca con los recursos humanos ni materiales suficientes, al menos en la enseñanza pública, y se echan de menos medidas gubernamentales como emisión de películas, series, dibujos animados en versión original subtitulada, como se hace en otros países? Y, si es un requisito tan imprescindible, ¿no debería impartirse como una asignatura obligatoria más del currículum del Grado?

Entretodos

Publica una carta del lector

Escribe un 'post' para publicar en la edición impresa y en la web

Entiendo que deba exigirse a quienes aspiren a un trabajo en el que el dominio del inglés (o de otra lengua extranjera) sea imprescindible, pero no para el resto de los estudiantes, la inmensa mayoría de los cuales quieren ejercer en su propio país -si, con un poco o un mucho de de suerte, lo consiguen- como maestros, profesores, médicos, ingenieros, arquitectos, asistentes sociales, etcétera, y que podrán hacerlo hablando en español, en gallego, en catalán o en vasco. Claro que, si han de acabar sirviendo copas en un bar en verano, en una zona turística, es posible que sí que deban  tener conocimientos de idiomas, aunque no creo que sea necesario un nivel tan alto.

Ni siquiera al presidente del Gobierno ni a los ministros se les exige el dominio del inglés ni de ningún otro idioma. ¿Se entiende que no lo necesitan en el ejercicio de sus funciones y que para ejercer en este país coo maestro de educación especial o de música, de enfermera o de ingeniero técnico nuestros estudiantes sí que lo necesitan? Además, el Reino Unido abandonará la Unión Europea y el presidente de EEUU no muestra una buena disposición hacia la UE. No sería muy injusto que fueran ellos ahora quienes debieran esforzarse en dominar alguna de las lenguas de la UE.

Debería facilitarse el aprendizaje de idiomas en todos los niveles de la enseñanza desde la educación infantil y estimular su aprendizaje, porque hacerlo nos enriquece. Pero nunca adoptando medidas tan discriminatorias e injustas. No, esta normativa no puede ser legal. Y, si lo es, insisto, me parece tremendamente injusta. Debería recurrirse esta normativa y conseguir que sea anulada.

Participaciones de loslectores

Másdebates