Contenido de usuario
Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.
Yo soy alemán. No comparto en absoluto la política aplicada por mi Gobierno y por Europa en esta crisis. Pero estoy sobradamente harto de oír que los alemanes somos los culpables de todo el mal que ocurre en Europa y en particular de la situación en Grecia. Alemania tiene mas de 200.000 millones de euros expuestos en los fondos de solidaridad de la UE. Casi 90.000 millones en avales para Grecia. Tampoco es que nos sobre el dinero. Acabamos de salir de una crisis que comenzó en el año 2000 y que nos ha costado también mucho esfuerzo y sacrificio. También tuvimos que padecer unas medidas de austeridad duras y en muchos casos desequilibradas. Pero aun con algún que otro matiz los sacrificios han posibilitado una recuperación de la senda del crecimiento y nos hemos podido blindar mejor de los efectos de crisis que los demás países. Entiendo que para nosotros las medidas de austeridad han sido eficientes. Considero también que esta política no es aplicable a todos los paises y que los paquetes de medidas se deberían individualizar mas según las condiciones de cada país. Pero lo que no puede ser es que el Gobierno de un país en bancarrota que ha estado despilfarrando dinero para subvencionar subidas de pensiones y de sueldos durante más de 30 años, que no dispone de un sistema fiscal eficiente, que ha estado políticamente y económicamente penetrado por nepotismo y fraude, considere públicamente a sus acreedores terroristas financieros y que encima utilicen un referéndum como medio para que sea justificado por el pueblo. Me asusta que en este foro haya tanta gente que confundan esta manera de actuar con una lección democrática. Me preocupa que en España el populismo también se este asentando de manera amenazante. Estos referéndums no son ni mucho menos fruto de una democracia sana, sino más bien la sustancia del totalitarismo. Los señores Chávez, Castro, Franco, Hitler etcétera. han utilizado este tipo de encuestas para ampliar y perpetuar su poder.