"Firmé un contrato de cuatro horas como camarera pero trabajaba el doble y no me lo pagaban"

Hace un par de meses, en vista de los precios de máster y un poco planificando mis necesidades económicas para terminar la etapa universitaria, empecé a trabajar a tiempo parcial. Entré en el sector de la hostelería, donde ejercía como ayudante de camarera por cuatro horas remuneradas según contrato. En la realidad, y lejos de lo estipulado en dicho contrato, ejercía de camarera (y no de ayudante), pues me tenían sola como encargada del turno de cenas y hasta el cierre, lo que me llevaba a hacer cada día más horas de la cuenta.

Al pasar los meses y no ver reflejadas económicamente estas horas que hacía de más, empecé a reclamar, y la respuesta fue que la escasa facturación no permitía remunerar este tiempo que pasaba de más trabajando por cuenta ajena. Propuse soluciones más allá de cobrar esas horas, pero la gerente del restaurante me echó sin darme motivos coherentes. Sigo batallando por ver compensado mi esfuerzo extra mientras mis excompañeros en cocina siguen trabajando más de cuatro horas diarias de forma ilegal y con temor a la represalia que ejerció públicamente la gerente del restaurante contra mí.

Con esta situación me gustaría exponer la falta de cumplimiento de muchos contratos y la angustia e impotencia que sufren muchos trabajadores al ver que deben enfrentarse a muchos trámites para recibir lo merecido por su esfuerzo. Aprovechando también para, cómo no, denunciar las condiciones laborales a las que muchos empresarios someten con egoísmo lucrativo y falta de humanidad.