Contenido de usuario Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.

Cuidado, el agua dulce se acaba

El embalse de la Llosa del Cavall, en el río Cardener, afluente del Llobregat, durante la gran sequía del año 2005. Todo indica que se repetirán episodios similares.

El embalse de la Llosa del Cavall, en el río Cardener, afluente del Llobregat, durante la gran sequía del año 2005. Todo indica que se repetirán episodios similares. / MARC VILA

Susana Ripa

Cada vez hay menos reservas de agua, de hecho, hemos llegado al mínimo histórico desde 1995. Es evidente que cada año llueve menos, pero considero que la mala gestión de las aguas públicas no ayuda a esta situación de sequía. Hay muchas redes de distribución pública que tienen escapes y fugas.

Entretodos

Publica una carta del lector

Escribe un 'post' para publicar en la edición impresa y en la web

¿Qué se está planificando a nivel español para solucionar este problema? Parte de la solución está en sus manos pero la otra está en las nuestras. Dejemos de dar por sentado que el agua estará siempre ahí y comencemos a hacer un uso moderado de esta.

 

Participaciones de loslectores

Másdebates