Mapa de los resultados electorales por municipios

La bipolaridad impuesta en la campaña por los discursos de los partidos que apuestan sin reservas por la independencia y los antisecesionistas rotundos, es decir los que ya tienen claro que votarían sí o no en un hipotético referendo, ha frenado la mayoría "excepcional" que ansiaba el presidente Artur Mas. No obstante, ha consolidado una mayoría parlamentaria más que absoluta del bloque soberanista y también ha dado importantes réditos a los centralistas. El efecto de la bipolarización se hace evidente al comparar los votos absolutos.

Así, el bloque de CiU, ERC y CUP han obtenido 1.734.852 sufragios, 312.849 más que en las autonómicas del 2010. El bloque españolista, el formado por PPC y Ciutadans, ha sumado 746.122 votos, a mucha distancia de los primeros, pero con 252.902 más que hace dos años. Por contra, los partidos con discurso más ambiguo en la cuestión nacional, PSC e Iniciativa, logran solo 76.133 votos más que en los pasados comicios, aunque se sitúan en 882.190.

LA ASISTENCIA A LAS URNAS

Menos votos blancos y abstenciones

El espectacular incremento de la participación, de casi el 70% y 11 puntos más que en el 2010 --a la espera del voto por correo--, es una de las principales causas del nuevo mapa parlamentario. De entrada, mayor participación perjudica siempre a la fuerza mayoritaria, en este caso a CIU, pero es que el domingo fueron a las urnas más de 610.000 personas que el 2010 se abstuvieron por un histórico poco interés por los comicios autonómicos, pero que ahora se han movilizado. También se han reducido los votos en blanco, solo 52.899, casi 39.000 menos que hace dos años.

De este modo, el conjunto de los partidos han recibido algo más de 533.000 votos que en el 2010. Una buena parte ha ido a las fuerzas españolistas de derechas, pero el nuevo votante también ha beneficiado a Esquerra, Iniciativa y, por supuesto, a la CUP, la gran sorpresa de la jornada electoral.

EL EFECTO JUNQUERAS

ERC pesca en CiU, ex Reagrupament y SI

Oriol Junqueras, que se ha estrenado como líder de Esquerra en unas autonómicas, va camino de ampliar el éxito seductor que ejerce como alcalde de Sant Vicenç dels Horts, donde ha logrado que la gran mayoría de sus ciudadanos lo adoren al margen de ideologías políticas. Por primera vez en la historia de la democracia, ERC se sitúa como segunda fuerza gracias al peor resultado del PSC en unas autonómicas, pero también a un espectacular incremento de votos, 496.292, doblando con creces los obtenidos en el 2010, donde acusó el desgaste acumulado de los años de tripartito.

A tenor de los resultados, ERC ha pescado en los caladeros soberanistas de CiU, Solidaritat y de lo que fue el Reagrupament, obteniendo un botín de más de 186.000 votos. Y aún ha sumado otros 90.000 más, algunos procedentes del sector soberanista del PSC, pero la mayor parte de antiguos abstencionistas.

LA DEBACLE SOCIALISTA

El 50% del voto perdido por el PSC es de BCN

El PSC nunca había cosechado tan mal resultado en unas elecciones autonómicas como el pasado domingo, con solo 20 diputados en el Parlament y 51.900 votos menos que el 2010, lo que le sitúa como tercera fuerza, por detrás de Esquerra. Por primera vez desde 1980, el presidente del grupo no ejercerá de jefe de la oposición, a menos que los republicanos acepten finalmente formar Govern con CiU. Aun así, los resultados obtenidos por la lista encabezada por Pere Navarro han sido mejores que los que pronosticaban las encuestas.

La ciudad de Barcelona es donde los socialistas han perdido el grueso de sus votos, 28.575, más de la mitad de los que se han dejado en el camino desde los comicios de hace dos años. El PSC solo ha logrado la victoria en el distrito de Nou Barris. En Sarrià-Sant Gervasi ha quedado en sexto lugar, por debajo incluso del resultado obtenido por Iniciativa y con solo algo menos que 2.000 votos más de la CUP, lo que incrementará aún más la crisis interna que sufren los socialistas barceloneses desde la pérdida de la alcaldía en el 2011.

El voto perdido del PSC ha beneficiado principalmente a Iniciativa, que ha aumentado su apoyo electoral en más de 128.000 sufragios. Ciutadans ha sido otra de las formaciones receptoras de voto exsocialista. Parte del llamado sector catalanista habría dado también su voto a CiU y ERC.

LA SORPRESA

El Eixample se erige en feudo de la CUP

La CUP ha sido la gran sorpresa de los comicios, al conseguir tres diputados por la circunscripción de Barcelona, mostrando así que se trata de un fenómeno eminentemente metropolitano. De hecho, se esperaba que esta formación obtuviera sus diputados en circunscripciones más afines, como Girona y Tarragona.

Los tres diputados de la CUP sustituirán a los cuatro de Solidaritat gracias a los 92.621 votos obtenidos en la provincia de Barcelona. Más de una tercera parte de este apoyo procede de la capital catalana, cuyo distrito del Eixample se configura como su feudo más importante al lograr 5.657 sufragios. Sant Martí y Gràcia son otros de los distritos donde consiguen mayor implantación, con más 4.000 votos en cada uno.

EL PULSO DE LA DERECHA

C's le gana al PP la batalla españolista

Ciutadans le ha ganado por goleada al PP la partida por quién se quedaba con el mayor número de los votantes españolistas que se han movilizado en estas elecciones contra el plan soberanista de Artur Mas. La lista de Albert Rivera logra nueve diputados, triplicando su representación parlamentaria gracias a los 274.925 votos recibidos, 168.771 más que en el 2010.

El PP encabezado por Alicia Sánchez-Camacho solo consiguió sumar 84.131 votos a los 387.066 obtenidos dos años antes.