Relaciones laborales

Inquietud entre los repartidores ante la falta de avances de la nueva 'ley rider'

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Gabriel Ubieto

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Miles de trabajadores de plataformas digitales en España están inquietos y a expensas de los próximos pasos que de el Ministerio de Trabajo en su nueva regulación del empleo en el sector. Unos porque temen que la tardanza en la nueva norma rebaje sus pretensiones de laboralización y otros porque rechazan que las intenciones iniciales del departamento liderado por Yolanda Díaz se acaben consumando. Fuentes del Ministerio de Trabajo consultadas afirman que esta regulación "sigue siendo una prioridad para este Ministerio", pero declinan detallar plazos ni los motivos sobre porque todavía no se les ha remitido documento alguno a los agentes sociales para comenzar a perfilar un borrador conjunto de proyecto de ley.

Trabajo sacó a exposición pública la nueva ley para regular el trabajo en plataformas el pasado 5 de junio, al mismo tiempo que el proyecto para reformar las condiciones del trabajo a distancia. Mientras esta segunda ha entrado en el trámite de urgencia y patronal y sindicatos ya tienen reuniones programadas para comenzar a debatirla, sobre las plataformas digitales no han trascendido novedades ni existe calendario alguno. En paralelo, las causas judiciales siguen su curso, pronunciados los tribunales hasta ahora mayoritariamente a favor de que los 'riders' de plataformas deben ser trabajadores por cuenta ajena.

Y mientras, los trabajadores del sector permanecen a la expectativa de esa ley que persigue clarificar esa relación de asalariados. Partidarios y detractores de esa nueva regulación prometida por Trabajo que pretende poner coto al uso de falsos autónomos en las plataformas digitales. El perfil más mediático entre estos son los ‘riders’ de empresas de reparto como GlovoDeliveroo o UberEats, que en las últimas semanas se están movilizando para urgir o manifestar su rechazo al espíritu de esa nueva norma. Según datos de la patronal Adigital, en el 2018 había en España 14.337 personas dedicadas al 'delivery' en plataformas. Un sector que ha ido al alza en facturación y demanda desde entonces.

"La gente quiere hacer más horas, hasta que aguente el cuerpo"

Badr Eddine Hilali

— Presidente de AAR

Los detractores de la nueva ley son los 'pro autónomos'. Invocan la "flexibilidad" de esta fórmula para poder trabajar jornadas que superan las 10 horas, con las que dicen conseguir ingresos por encima del salario medio. "La gente quiere hacer más horas, hasta que aguante el cuerpo", explica Badr Eddine Hilali, promotor de la Asociación Autónoma de Riders (AAR). "Yo puedo parar cuando quiera, seguir cuando quiera y trabajar 12 horas. Es una decisión que tomo yo, que no toma la empresa por mi", añade. Un argumento del que difiere Daniel Gutiérrez, miembro de RidersXDerechos. "No trabajamos cuando queremos, trabajamos cuando nos dejan. Hay un montón de gente que se pasa el día cazando horas", replica este 'pro laboralización'.

"No trabajamos cuando queremos, sino cuando nos dejan"

Daniel Gutiérrez

— RidersXDerechos

A la ‘caza’ del poder trabajar

'Cazar' el máximo de horas es la clave para conseguir un mínimo de ingresos que superen los costes de ser autónomo en el presente modelo. Un equilibrio que las plataformas han ido alterando con la entrada de un mayor número de riders y con la reducción de tarifas, como ha pasado durante los primeros meses del estado de alarma. Más gente disponible para las empresas, menos horas a repartir y peor pagadas. "Si fuéramos asalariados sabríamos qué cobraríamos el mes que viene, no como ahora", señala Gutiérrez.

"Si fueramos asalariados sabríamos qué cobraríamos el mes que viene, no como ahora"

Daniel Gutiérrez

— RidersXDerechos

Badr Eddine Hilali dice facturar cada mes y con cierta regularidad 3.000 euros, por un trabajo de 50 horas semanales combinando diversas plataformas, como Deliveroo, Glovo o UberEats. Un perfil atípico el suyo, pues plataformas como Glovo o Deliveroo tasan la ganancia por hora en entre 8 y 10 euros la hora. Según estas cifras, solo contando entregas y sin tener en cuenta el tiempo que el 'rider' se pasa 'cazando' horas, 50 horas a la semana dan una facturación de entre 1.600 y 2.000 euros. A lo que cabe descontar el pago de los autónomos, el vehículo, el teléfono y que no incluye ni la cobertura por baja médica, el paro ni las vacaciones, entre otros.

En el actual modelo, también corre a cargo de los riders costes como las mascarillas. Una cuestión de obligado uso en las empresas de mensajería y que no todos los repartidores de 'delivery' han llevado estos días, al no trabajar 'directamente' para ninguna empresa que tenga la obligación legal de imponerselo. "Depende de lo que ganes no te llega", dice Gutiérrez. "Hay gente que no es profesional", opina Eddine Hilali. Tampoco opción de ertes para el colectivo, que lo que ha dejado de trabajar a dejado de ingresarlo.

Un agujero para la Seguridad Social

Que el modelo de autónomos que rige actualmente en el 'delivery' de plataformas supone un menor coste para las empresas y una menor recaudación para la Seguridad Social es un consenso entre detractores y partidarios de la norma. "¿Por qué el Gobierno está buscando convertirnos en asalariados? Porque la Seguridad Social va a ingresar más. Son los primeros interesados", afirma Badr Eddine Hilali. Un informe de UGT cifra en 168 millones de euros los que deja de ingresar el erario público solo con el sector 'delivery'. "Si se extiende a otros sectores el agujero en la Seguridad Social va a ser insostenible", señala el miembro de RidersXDerechos.

"El Gobierno busca hacernos asalariados para que la Seguridad Social ingrese más"

Badr Eddine Hilali

— Presidente de AAR

Los tribunales han diferido hasta ahora para encajar a los riders como asalariados, entre el convenio de hostelería o el de logística y transportes. El promotor de AAR rechaza pronunciarse sobre uno u otro y afirma que las empresas ahorrarán costes haciendo contratos de menos horas de las trabajadas y en las categorías peor pagadas. "Cobrar por pedido te asegura que eso no va a pasar", defiende. "En ningún momento estamos mitificando ser asalariados ni que con ello se vayan a acabar todos los problemas. Es un paso adelante. Y la legislación tiene que venir de la mano de un refuerzo de Inspección de Trabajo", replica Gutiérrez de RidersXDerechos.

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