El presidente de BBVA confía en González pero promete una investigación a fondo de las escuchas

En un medido ejercicio de equilibrio, Carlos Torres, presidente del BBVA desde hace unas semanas, ha asegurado este viernes que llegará hasta el final para aclarar las escuchas ilegales que presuntamente ordenó el banco al excomisario Villarejo, pero al tiempo se ha mostrado convencido de que su antecesor, Francisco González, no tuvo nada que ver. "Él transmite una conciencia muy tranquila y que no sabía nada de las irregularidades. Yo le creo, me ha demostrado durante los 10 años que he trabajado con él que es una persona de principios", ha mantenido.

Según vienen publicando distintos medios desde mayo, el BBVA pagó más de cinco millones de euros a la empresa de Villarejo entre el 2004 y el 2017 por distintos servicios, entre ellos las presuntas escuchas (unos 4.000 teléfonos y unas 15.000 llamadas de políticos, empresarios y periodistas) para tratar de frenar el intento de la constructora Sacyr de controlar la entidad en época del Gobierno de Zapatero.

Torres, consejero delegado del BBVA desde el 2015 antes de ser aupado por González a la presidencia, ha mostrado sin tapujos su confianza en su antecesor. Así, le ha llamado su "guía y referente", persona "integra" y "claramente un visionario". Pero al mismo tiempo, ha asegurado que su opinión personal en nada "influye, ha influido o influirá" en la investigación encargada por el banco. "Que no quede ninguna duda de que vamos a levantar todas las piedras y dar luz sobre al asunto", ha asegurado tras prometer "tolerancia cero, sin contemplaciones" una vez se conozca el resultado de dicha investigación, bien con los posibles responsables del banco o bien con otras personas "si todo lo que se está contando resulta ser falso".

Cuestión de meses

El ejecutivo se ha comprometido a realizar la investigación "con todo rigor y diligencia, de manera exahustiva y la máxima celeridad", pero ha advertido que será "cuestión de meses" dado que hay que analizar "millones de documentos" físicos y digitales de gran número de directivos. 

Tanto el Banco Central Europeo (BCE) como el Banco de España le han apremiado a concluir los trabajos cuanto antes, pero Torres ha defendido que no es posible hacerlo más rápido. También ha mantenido que la entidad no ha retirado a González la presidencia de honor del BBVA y su fundación porque ello supondría "prejuzgar" el resultado de la investigación.

Banco honesto

La entidad, ha explicado, comenzó una investigación interna en mayo con el apoyo del bufete Garrigues "de las que se hacen muchas todos los años". La contratación de servicios de seguridad e inteligencia por parte de los bancos, ha defendido, es "normal", pero querían esclacerla.

La publicación el 9 de enero de las presuntas escuchas, ha añadido, supuso un "parteaguas, era un caso distinto", por lo que contrató un examen externo liderado por Garrigues con la colaboración de Price Whaterhouse Coopers (PWC) y Uría Menéndez. Hasta ahora, ha explicado, no se ha encontrado "ningún documento" que demuestre las escuchas, como tampoco se ha recibido ninguna demanda de los afectados. "El BBVA ha sido, es y seguirá siendo un banco honesto", ha defendido.

Resultados

El BBVA ganó 5.324 millones de euros el año pasado, el 51,3% más que en el 2017. Los ingresos cayeron el 6%, afectados por el desfavorable tipo de cambio de los países donde opera. Pero el beneficio mejoró con fuerza gracias a las menores provisiones para afrontar pérdida y saneamientos del valor de activos (hace dos años registró unas minusvalías por su participación en Telefónica de 1.123 millones, que ahora beneficiar la comparación), así como por los 633 millones en plusvalías obtenidos por la venta de su negocio en Chile.

Por áreas de negocio, la actividad bancaria en España generó 1.522 millones, el inmobiliario en el país redujo sus pérdidas a 78 millones, Estados Unidos aportó 735 millones, México registró 2.384 millones de beneficio, Turquía contribuyó con 569 millones, América del Sur con 591 millones y el resto de Eurasia con 93 millones.